Residencias de mayores en Suecia, la visión del arquitecto Marc Trepat

Marc Trepat, un destacado arquitecto especializado en el diseño de residencias de mayores asistió al último viaje geroasistencial que organizamos en Inforesidencias.com para conocer cómo se atiende a la tercera edad en Suecia.

Durante el viaje le pedimos que compartiese sus reflexiones con nosotros y éste es el primero de los posts que vamos a dedicar a las mismas.  Muchas gracias Marc.

Entre el 6 y el 10 de junio de 2016, viajé con Inforesidencias.com a Estocolmo para visitar centros de atención a personas mayores y otros equipamientos y empresas relacionadas en la atención a personas con demencia.

Unidad de convivencia en residencia de ancianos en Estocolmo

Las residencias de tercera edad funcionan como Unidades De ConvivenciaComo es habitual en este tipo de encuentros en los que se profundiza en la atención a personas mayores, yo era el único arquitecto. Mis compañeros de viaje eran directores, gerentes y profesionales de residencias de diferentes partes de España, que me fueron de gran ayuda para entender las necesidades de las personas mayores con demencia ayudándome a ampliar mi conocimiento sobre cómo, desde la arquitectura, podemos ayudar a su bienestar.

Lo primero que sorprende a alguien que se dedica a la arquitectura para personas mayores, si comparo lo visto en Suecia con lo que tenemos en casa, es que las unidades son mucho más pequeñas y por lo tanto los espacios comunes están en relación, pero los apartamentos (lo que para nosotros serían las habitaciones) son mucho mayores. Sin embargo, lo más impresionante es que en los espacios, en general, hay muy poca gente. Se respira una tranquilidad inaudita en comparación a una residencia de nuestro país.

La Atención Centrada en la Persona en residencias de tercera edad en Suecia

Está claro que en Suecia, el sistema ACP (Atención centrada en la para-suena) está mucho más implementado. Esto es así por un aspecto cultural de la propia sociedad sueca, y es el respeto que tienen por la libertad personal.

Conceptos como “los trabajadores son personas invitadas a casa de los abuelos” o “hay que tener toda la información de la historia de la persona para facilitar que su vida dentro de la residencia sea lo más parecido a la vida que ha llevado hasta ahora “o” hay que pedir permiso a la persona mayor para cualquier cosa que se le propone como por ejemplo: a qué hora se quiere levantar, ¿cuántas veces se quiere duchar a la semana, a qué hora quiere comer, qué le gusta comer o incluso, si quiere tomar la medicación o quiere que le sujetemos a un sillón para que no se caiga? “son aspectos que llevan a extremos límite lo que conocemos como” Atención Centrada en la Persona “.

Como arquitecto me han interesado mucho estos aspectos que me dan pistas sobre cómo deben ser los entornos que necesitan residentes y trabajadores para conseguir el ambicioso objetivo de “vivir como en casa”, pero mi interés también se ha centrado, fundamentalmente, en cómo son estas unidades, cuáles son los aspectos que ayudan a facilitar que se pueda mantener la historia de vida de las personas mayores.

Evolución del sistema sueco de residencias de mayores

El modelo normativo establecido en Estocolmo para personas con demencia está fundamentado en unidades de un máximo de 9 personas, todas ellas en apartamentos individuales (o dobles en caso de parejas). Sin embargo, también hemos visitado otras unidades más grandes dependiendo del estado de las personas que viven en ella.

Pero a este modelo no se ha llegado directamente, sino que como en todas partes, ha habido un proceso:

  • 1870-1945 Instituciones de carácter total de gran dimensión.
  • 1945: Se construyen pequeñas viviendas modernas para jubilados más, con barreras y servicios domiciliarios.
  • 1965-1975: Se crean viviendas adaptadas con servicios en cada barrio y plazas de la larga estancia en centros socio sanitarios para personas con grandes necesidades.
  • 1976 – Se inicia un proceso definitivo para la desintitucionalización.

Fue el psiquiatra escandinavo Bengt Nirje, quien con su teoría “The Normalization Principle and Its Human Management implicaciones”[1] trabajando básicamente con personas con discapacidad intelectual, estableció que todas las personas deben poder vivir una vida normal. Las personas deben estar “orgullosas” de su propia discapacidad. Las incapacidades, normalmente, pueden facilitar que se desarrollen otras capacidades superiores en otros aspectos. Es una evidencia que las personas ciegas desarrollan los otros sentidos de forma mucho más eficiente que las personas que disponemos de todos los 5 sentidos, por tanto unas discapacidades pueden incrementar otras capacidades.

Esta teoría es la base de la cultura de la sociedad sueca y se aplica a todas las personas, también a las mayores con demencia. Mi percepción es que la sociedad sueca y por extensión la nórdica, tiene una forma de ser que en muchos aspectos es mucho más comunitaria y en otros más individual. Me explico: son personas que tienen una cultura del compartir mucho mayor que la nuestra (la mediterránea). Su clima mucho más duro que el nuestro las hacen tener la necesidad de vivir más tiempo dentro de los edificios y de tener que compartir y ayudarse más, sobre todo en personas que viven fuera de las ciudades. Cuando estás a treinta grados bajo cero y tienes un dolor de estómago, tu única manera de sobrevivir es que te ayude tu vecino. Por tanto, están mucho más acostumbrados a compartir, pero por otra parte, son muy celosos de su propia intimidad.

Esto explica que las experiencia de co-housing sean muy extendidas, y por otra parte, los apartamentos o habitaciones de las unidades de demencia o de las viviendas tuteladas sean individuales.

En el próximo post prometo hablar de arquitectura

Marc Trepat Carbonell
Arquitecto

marc.trepat@bta.cat

[1]http://canonsociaalwerk.eu/2008_inclusie/The%20Normalization%20Principle%20and%20Its%20Human%20Management%20Implications.pdf

 

Comentarios cerrados.