Más de 400 horas de conversación durante las cuales el personal ha hablado con sus interlocutores sobre anécdotas, recetas, aficiones y consejos para pasar de una forma más ligera el confinamiento.
Tras una primera llamada en la que se consideraba la situación en la que se encontraban las vecinas y vecinos seleccionados, se les planteaba la posibilidad de mantener el contacto durante los días de confinamiento, opción que se demandó en un 38 % de los casos. A partir de este momento, se establecía una comunicación semanal que ha resultado muy útil para conservar, en la medida de lo posible, los niveles de socialización de los y las mayores, además de procurar al ayuntamiento un feedback en tiempo real de la salud y bienestar de su población más adulta.