Un ejemplo muy clarificador es el que de Córdoba. En esta provincia están registradas 18989 personas como beneficiarias del sistema de dependencia de la Junta de Andalucía. De ella, más de 12 500 son mujeres, cerca del 64 % del total.
En el 2016, 466 cordobeses se incorporaron al sistema de dependencia, que ha contado con un presupuesto superior a los 113 millones de euros. De ese monto, el 53 % está gestionado por entidades locales.
En los diez años de vigencia de la Ley de Dependencia, un total de 40 400 personas de la provincia de Córdoba han recibido 53 500 prestaciones. El presupuesto dedicado en Andalucía ha sido de más de 10 000 millones de euros, de los cuales 1210 han sido para Córdoba. Esto supone financiar 5780 plazas en residencias y centros de día con la creación de 5500 empleos en Córdoba, más otros 2000 en el servicio de ayuda a domicilio.
Según el Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2016 la provincia de Córdoba ha batido un nuevo máximo histórico de envejecimiento pues cuenta con casi 114 personas mayores de 64 años por cada 100 jóvenes de 16, es decir una tasa del 113,6 %.
En Andalucía la tasa es del 94% y el conjunto del estado es de 116 %, un envejecimiento acelerado e imparable. Córdoba, según estos datos, es la segunda provincia más envejecida de Andalucía, por detrás de Jaén, que registra una tasa del 117,4 %.
Las comparativas anuales muestran que si bien siempre ha sido así la clasificación, a finales del siglo pasado. Córdoba era todavía una sociedad joven: en 1985 había apenas 45 mayores de 64 años por cada 100 menores de 16, lo que refleja una sociedad en expansión, en el año 2000, la tasa ya era de 86,8%, prácticamente el doble y creció en los primeros cinco años del siglo has el 96,2 %. En 2010 era del 103 %, por lo que en solo seis años se han añadido diez puntos.
Para hacer una panorámica general de la comunidad autónoma, Granada tiene una tasa de 101,8 %, Málaga un 98,8 %, Huelva un 92,5 % un 86 %, Sevilla un 85,3 % y Almería un 78,5 %.