Unas mujeres de una residencia de la tercera edad son las protagonistas de la novela ganadora del Premio de Novela Café Gijón

La novela Hasta aquí hemos llegado ha sido la ganadora del prestigioso Premio Café Gijón de novela. El autor, Antonio Fontana (Málaga, 1964),  ya había sido finalista en este mismo premio en 2003 con El perdón de los pecados.

Por primera vez, el jurado se ha reunido de forma telemática. En el jurado estaba José María Gulbenzu, como presidente y  Mercedes Monmany, Rosa Regàs, Antonio Colinas y Marcos Giralt Torrente.

En su comunicado, el jurado señala que se ha premiado la novela   por dos cualidades fundamentales: «La primera es  que se trata de una visión tan sutil como insólita de la ancianidad; la segunda, el riesgo que ha asumido el autor al crear un conjunto de voces bien caracterizadas, las cuales rompen con los estereotipos que más circulan en nuestra sociedad y dan una perspectiva compleja, dinámica y tragicómica de dicha etapa vital».

Hasta aquí hemos llegado gira en torno a un grupo de ancianas que viven en la residencia Peña Hincada, sita en un lugar indeterminado de la provincia de Málaga, donde consumen su tiempo rumiando obsesiones y recuerdos. Una de ellas desaparece y otra se empeña en encontrar su cadáver. La novela tienen grandes dosis de incorrección y humor negro. Traza también un retrato despiadado de los hombres por parte de estas mujeres que son feministas sin saberlo.

Antonio Fontana es autor de cinco novelas: Sol poniente (Premio Málaga 2017), Hostal Parisien, Plano detallado del infierno, El perdón de los pecados Hostal Parisien, Plano detallado del infierno, El perdón de los pecados y De hombre a hombre. Licenciado en Periodismo, ha trabajado en el diario ABC durante treinta años, diecinueve de ellos como coordinador de libros en el suplemento ABC Cultural.

El Premio de Novela Café Gijón, fue instituido en 1949 por el actor Fernando Fernán-Gómez, en el célebre establecimiento del paseo de Recoletos de Madrid. La idea de los impulsores, entre los que se encontraban Gerardo Diego, Camilo José Cela y Enrique Jardiel Poncela, era crear un premio de novela corta que compitiera con el Nadal, que es de novela larga, y que sirviera para dar a conocer los escritores de la generación que se reunía en las tertulias del café.

A partir de 1955 hasta 1975 fue el café el encargado de gestionar el premio. Su prestigio se debía a la difusión y calidad de los autores, más que a la dotación económica, pues muchas ocasiones las obras galardonadas no eran publicadas por falta de fondos. A finales de la década de los setenta sufrió una grave crisis, tanto económica como de gestión. La falta de patrocinio y difusión posterior hizo que el premio desapareciera pese a las ocasionales ayudas y compromisos de editoriales y medios de comunicación.

En 1989 por el Ayuntamiento de Gijón recuperó el premio y desde entonces se encarga de su organización. Está dotado con 20 000 euros y desde el año 2007 se encarga de la publicación de la obra seleccionada la editorial Siruela.