Castilla y León considera suavizar las medidas en sus residencias

07/10/2021

Ahora que se ha comenzado a administrar la tercera dosis de la vacuna contra la COVID en las residencias de ancianos de Castilla y León, la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades de la Junta se plantea la posibilidad de relajar las restricciones en los centros.

Isabel Blanco, consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades, comunicó este pasado domingo que las medidas anti-COVID vienen pautadas por una guía de actuaciones que se actualizó por última vez el 19 de agosto. Sin embargo, en función de los avances de la inmunización con la tercera dosis, se podrá relajar el protocolo si es necesario y dar mayor libertad a los usuarios de los centros.

El motivo por el que estos cambios están tardando más en llegar a las residencias, recuerda la consejera, es que las personas de edad más avanzada o con determinadas patologías son más vulnerables al virus y es primordial mantener la prudencia para garantizar la seguridad de este colectivo. Así pues, aunque ahora se permitan las salidas de los residentes y las visitas en los centros, todavía es obligatoria la cita previa y los encuentros han de realizarse en los lugares habilitados para ello y cumpliendo con las medidas de higiene estipuladas.

Blanco señala también que es la Consejería de Sanidad quien determina el ritmo de vacunación acorde a las dosis, la planificación y la organización, pero asegura que la administración de la tercera dosis en los centros para la tercera edad avanza tal y como estaba previsto y sin contratiempo alguno.

Por el momento se calcula que la campaña, que dio comienzo el pasado jueves, se completará para mediados o finales de octubre, cumpliendo así el propósito de que los residentes se encuentren inmunizados cuanto antes y estén protegidos para la época con mayor incidencia de gripe y otras posibles patologías.

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