En Inforesidencias nos agrada presentar experiencias que ocurren en las
residencias para mayores que van mucho más allá de los cuidados y las rutinas y
que muestran que quienes viven y trabajan en ellas son mucho más que residentes
y profesionales.
Este programa se imparte no solo ayuda a las personas más desfavorecidas,
sino que intenta favorecer las relaciones intergeneracionales para beneficiar
tanto a jóvenes como a mayores.
El programa de acompañamiento a personas mayores nace en Cáritas León en el Año Europeo de Envejecimiento Activo y Solidaridad Intergeneracional 2012.
Con este programa, el objetivo de Cáritas es, en un principio, visitar a
mayores que no tengan familia o reciben pocas visitas e intentar que las
personas mayores se mantengan en contacto con su entorno comunitario y social
mediante un servicio de acompañamiento.
Aunque en Sanyres se ofrece apoyo, comprensión y afecto a los residentes,
el hecho de recibir esta ayuda y autoestima por parte de jóvenes voluntarios de
distintos centros de León es muy beneficioso para ellos porque favorece las
relaciones sociales y la solidaridad intergeneracional.
Los voluntarios hacen compañía a la persona mayor que se le ha asignado,
conversan con ella, juegan a las cartas, leen el periódico…
Para ello, el grupo de voluntarios, con edades comprendidas entre los 14 y
17 años, son formados, coordinados y evaluados en su trabajo.
Previamente, tienen que conocer qué es Cáritas y su motivación y conocer el
colectivo con el que van a trabajar: las personas mayores, el proceso de
envejecimiento, las necesidades de los residentes y adquirir habilidades de
comunicación.
Además, antes de cada voluntariado, Cáritas organiza un cursillo para estos
jóvenes donde se realizan seminarios sobre temas como el envejecimiento activo
o la gerontología y la sanidad.
Los voluntarios de este proyecto forman parte de un equipo que trabaja de
forma coordinada y con criterios comunes, bajo la dirección y supervisión de
Cáritas.
En el curso 2012-13 se comenzó el programa con la participación
decuatro residencias geriátricas y cuatro colegios o institutos, en la
actualidad, curso 2015-16, son ya nueve residencias y nueve centros de
educación los implicados en el programa y el número de voluntarios ha pasado de
los 85 jóvenes que comenzaron el primer año a los cerca de 200 que son en la
actualidad. Igualmente ha aumentado el número de voluntarios coordinadores por
parte de Cáritas.
El Programa está demostrando ser útil y con mucho futuro.