Siri, Alexa, Cortana y otros tantos asistentes son parte de nuestro día a día: viven en nuestros teléfonos, tabletas y ordenadores; nos ayudan a realizar tareas como programar alarmas, llamar a contactos o buscarnos la programación televisiva para esa noche. Ahora han llegado a nuestros hogares en forma de altavoces inteligentes (speakers).
A falta de la pericia necesaria para configurar este altavoz a la red wifi y vincularlo al teléfono inteligente o dispositivo principal, puede ser una herramienta muy útil para las personas mayores que viven solas en sus domicilios.
Este tipo de asistentes tienen un funcionamiento bastante sencillo: se activa diciendo en alto una frase determinada (por ejemplo: «¡Oye, Siri!» o «¡Alexa!») y se utiliza el comando de voz que deseemos. A los speakers se les pueden realizar multitud de peticiones: buscar recetas de cocina; indicarle que active un cronómetro; hacer que sintonice una emisora determinada; lea los últimos titulares de un determinado medio; llamar a un familiar… E incluso leer audiolibros o contar chistes.
Por otro lado, estos elementos cuentan con sus propios electrodomésticos y objetos domóticos, tales como bombillas, persianas…
Sin duda, como cualquier dispositivo electrónico, lleva tiempo utilizarlo con destreza y disfrutar de todos sus beneficios; aun así, como se comprueba en muchos casos, es una herramienta útil que puede convivir con los servicios de teleasistencia que algunas personas tienen en sus casas.
Esperamos que este tipo de avances continúen mejorando la calidad de vida de todos aquellos que entran en la tercera edad, en este caso acompañados de un asistente virtual.