Claves para mejorar la calidad de vida de las personas mayores esta primavera

Debido al envejecimiento, el sistema termorregulador del cuerpo humano se ve alterado, provocando que la temperatura no se perciba de la misma manera y dificultando la adaptación al frío. Es por esto que las personas de la tercera edad son más propensas a sufrir enfermedades como gripes o catarros, que pueden unirse a las alergias típicas de la primavera.

Por esta razón, hay una serie de recomendaciones que el resto de la población podemos llevar a cabo con el objetivo de ayudar a las personas mayores a sentirse mejor en esta estación del año. La primera de ellas es evitar los cambios bruscos de temperatura, los cuales pueden causar un debilitamiento del sistema inmunológico. Así, habrá que procurar llevar la ropa adecuada para cada momento y no olvidar coger una prenda de abrigo, aunque el día parezca soleado.

Relacionado con las alergias y su prevención, evitaremos acudir a parques o espacios verdes en las horas de mayor concentración de polen, es decir, a primera y a última hora de la tarde. Aunque son zonas idóneas para pasear, es recomendable tomar precauciones como puede ser la protección de ojos, nariz y boca.

Por último, la alimentación y el ejercicio juegan un papel muy importante en la mejora de la calidad de vida de las personas mayores. Por ello, en primavera es aconsejable consumir alimentos que contengan vitamina D (lácteos), C (cítricos y algunas verduras), A (salmón y huevo) y E (aceite de oliva virgen extra), además de comidas ricas en zinc y en selenio. Asimismo, no hay que olvidar beber al menos 2 litros de agua al día y acudir al médico con regularidad, sobre todo si se padece algún tipo de alergia.