Cyrus Porter es un veterano
de la Segunda Guerra Mundial de 96 años que vive en el estado de Misuri en
Estados Unidos y declarado admirador de la cantante. En una entrevista que le
hizo un periódico local declaró que había acudido a dos conciertos de Taylor
Swift y que su música le ayudaba a estar cerca de sus 24 nietos. Al enterarse,
la cantante se presentó en su casa y ofreció a él y a su familia un breve
concierto acústico con solo su guitarra con sus temas más populares.
Por su parte, el afortunado fan le enseñó su casa y sus recuerdos de la guerra, mientras sus nietos hacían fotos y las colgaban en las redes sociales.
En esta ocasión el afortunado anciano y su familia se llevaron esa emocionante sorpresa. Sería estupendo que más artistas admirados hicieran estas acciones, no tiene porqué ser en los domicilios, seguro que un improvisado concierto en una residencia para mayores por parte de un cantante reconocido se encontraría con fans incluso más entusiastas que en un macrofestival.