Cada
año se espera el calor con mucho entusiasmo, la primavera con el sol
resplandeciente y las flores de muchos colores se hacen presentes, se deja
atrás la ropa abrigada para empezar con ropa ligera y caminatas al bosque o la
playa. Los zapatos cerrados se cambian por calzado ligero, menos pesado y si es
posible abierto para una mejor ventilación. Las comidas calientes se cambian
por comidas ligeras con muchas hortalizas, ensaladas de colores y bebidas
refrescantes.
Si embargo
también tiene sus inconvenientes la primavera y el verano especialmente en la población
mayor, ya que es más propensa a golpes de calor, a reacciones alérgicas,
molestias por el exceso de sudor, deshidratación, perdida de apetito entre
otros aspectos.
Ante
las temperaturas altas se aconseja cuidar de las personas mayores, son más
vulnerables a diferentes situaciones que comprometen su salud.
Consejos
para mantener la temperatura corporal estable ante la ola de calor en las
personas mayores.
El calor
pone en alerta a las autoridades para dar recomendaciones y proteger a la
población de las altas temperaturas. Generalmente en las personas mayores se
pide mayor vigilancia por parte de las familias y si tienen el servicio de
ayuda a domicilio y teleasistencia se mantiene una vigilancia más estrecha. En
el caso de las residencias geriátricas generalmente tienen las condiciones de ventilación
y alimentación controladas. Los usuarios de centros de día también son
vigilados por parte del personal