El coste de atención sanitaria en centros residenciales privados, que debería ser asumido por las Consejerías de Sanidad, asciende diariamente a 8,92 € por residente, según el informe "Análisis de los costes sanitarios en centros residenciales privados para personas mayores”, presentado hoy por la Fundación Edad&Vida y realizado por un equipo investigador de la Universidad Autónoma de Madrid.
El principal objetivo de este estudio es conocer el coste de atención sanitaria a personas mayores dependientes que asumen los centros residenciales privados y cuantificar la compensación de dicho coste por parte de las Administraciones Públicas.
Los centros residenciales de atención a las personas mayores ofrecen un servicio integral de atención que comprende: alojamiento y manutención, atención social y atención sanitaria. La atención sanitaria es de carácter universal y gratuito en España, aunque la realidad muestra que en los centros residenciales esta atención se presta no necesariamente financiada por los presupuestos públicos sanitarios.
El Presidente de la Fundación Edad&Vida, Higinio Raventós, ha defendido que las personas ingresadas en centros residenciales deben tener los mismos derechos que las que residen en sus domicilios particulares y, por lo tanto, la atención sanitaria que reciben debería quedar cubierta por un Módulo Sanitario, tal y como sucede en los países de nuestro entorno más cercano: Alemania, Francia o el Reino Unido.
El importe correspondiente al Módulo Sanitario, que deberían asumir las Consejerías de Sanidad correspondientes, se ha estimado en el estudio en 8,92 €/estancia/día, lo que supondría un incremento del 16,5% en la tarifa media concertada con la Administración.
Este coste se ha calculado computando, como coste sanitario, exclusivamente el coste del personal sanitario en centros residenciales. Dicho coste representa 1/3 del coste total del personal de atención directa y los 2/3 restantes corresponden a la suma del personal de atención social y a la dependencia (65%) y del personal de rehabilitación (2%).
Si tenemos en cuenta que, dentro del total de costes de personal, el coste de personal de atención directa supone un 73% y que el coste total de personal representa a su vez, el 72% del total de costes de gestión de un centro residencial, podemos concluir que más de la mitad del coste total por plaza en un centro residencial privado se destina a cubrir dos necesidades: las necesidades de atención sanitaria y las de atención social y a la Dependencia.
Para cubrir el coste sanitario que en estos momentos están asumiendo las residencias privadas, se debería contemplar un aumento de la tarifa concertada, en el caso de las plazas concertadas y, en el caso de las plazas privadas a precio de mercado, compensar dicho coste mediante una transferencia económica que permita reducir el precio que paga el usuario.
Los resultados del "Análisis de los costes sanitarios en centros residenciales privados para personas mayores” se han obtenido del estudio de 180 centros residenciales privados que gestionan un total de 26.777 plazas, con un porcentaje medio de ocupación del 83,4% y representatividad en las 17 comunidades autónomas.
Del total de plazas ocupadas el 53,9% son plazas privadas y el 46,1% son plazas concertadas. El perfil según el nivel de dependencia constata que el centro residencial es un recurso dirigido a personas mayores con grados de dependencia elevados. De hecho, el 67,3% de los residentes son Grandes Dependientes y Severos, mientras que el 20,2% tienen Dependencia Moderada. Si solamente se tienen en cuenta las plazas concertadas con la Administración, hasta un 81,8% de las plazas corresponden a grandes dependientes y dependientes severos.
Uno de los aspectos más novedosos y remarcables del estudio, desde el punto de vista metodológico, es que se ha realizado utilizando los datos de costes reales medios aportados por los propios operadores de residencias, incluso en la partida de costes salariales, lo que sin duda confiere un importante valor añadido a los resultados obtenidos en el mismo.
Recomendaciones de la Fundación Edad&Vida:
- La coordinación sociosanitaria es necesaria para abordar de forma integral las necesidades de las personas en situación de dependencia y ofrecer los servicios adecuados a sus necesidades concretas.
- El desarrollo del sector de atención residencial y sociosanitario debería basarse en la colaboración público-privada.
- El módulo sanitario debería ser financiado por el presupuesto sanitario y no asumido por los centros residenciales, sean públicos o privados, y/o el usuario.
- Las Administraciones Públicas deberían replantearse las tarifas vigentes y adecuarlas a los servicios que se prestan y a la calidad de los mismos.
- Una mayor participación de los beneficiarios de las prestaciones a través del copago permitiría reducir el diferencial actual entre coste real y tarifa concertada.
- La acreditación de servicios por grado y nivel de dependencia permitiría discriminar tarifas y adecuarlas a los servicios que realmente se prestan.
- A las personas con gran dependencia y dependencia severa (grados III y II) no debería poder asignárseles la prestación económica al cuidador familiar, ya que no permite garantizar una atención adecuada a sus necesidades sociosanitarias.
- Debería aplicarse el IVA superreducido a todos los servicios de atención a la dependencia, independientemente de si son financiados con dinero público o privado.
Edad y Vida celebrará del 28 al 30 de Marzo el III Congreso Dependencia y Calidad de Vida.