El objetivo de este estudio, basado en los recuerdos de los residentes de los 44 centros de ORPEA en España, es realizar una radiografía de la memoria de las personas mayores, a través de sus recuerdos. «Este año hemos dado un paso más y, además de preguntarles cuál es su primer recuerdo y con el único que se quedarían, hemos querido conocer aspectos más lúdicos y emocionales de sus vidas como los relacionados con sus primeras vacaciones, sus amigos de la infancia, su primer juguete, o la primera vez que vieron la televisión», explicó el director de Marketing de ORPEA, Ricardo Buchó.
Si bien la familia es el pilar fundamental de los recuerdos de los mayores, ya que el 75,2 % de los encuestados menciona como primer recuerdo la relación con sus padres y anécdotas divertidas con sus hermanos, los amigos de la niñez son parte fundamental de la infancia y así queda reflejado en este estudio, que constata que el 85,5 % aún recuerda el nombre de su mejor amigo de esta etapa de la vida.
Los juguetes también forman parte de los recuerdos más agradables. El 83,5 % de nuestros mayores recuerda el primer juguete que tuvo. Las muñecas y muñecos son los más referidos (66,5 %), ya sean de tela, ganchillo, cartón, plástico, incluso de piedra. También la pelota y peonzas marcan a esta generación. Los más afortunados recuerdan una bici o un coche de juguete. Entre las repuestas destacan algunas curiosas como un diábolo, un compás para el cole o bastidores pequeños para bordar.
A la pregunta de «¿Si se tuviera que quedar con un solo recuerdo de su vida, cuál elegiría?», la mayoría responde el día de su boda (20 %), seguida del nacimiento de sus hijos (16,2 %), pero jugar con los hermanos y amigos en la calle o algún viaje con familiares o amigos también se encuentran entre los recuerdos favoritos de los mayores. El 77,7 % de los encuestados rememoran su primer viaje por vacaciones. Como ocurre en la actualidad, las zonas costeras fueron la elección de la mayoría. Ciudades con mar como Torrevieja, Barcelona, Tenerife, Santander o Galicia son algunos lugares que nombran los encuestados, aunque también hay mayores que refieren la sierra o el pueblo de sus abuelos.
Para nuestros mayores, la aparición de la televisión fue toda una revolución. El 57,9 % de los mayores que han participado en el estudio recuerdan la primera vez que vieron una televisión. No es fácil acordarse de lo que se emitía en ese momento; algunas de las respuestas más generales son el NODO, corridas de toros, novelas, dibujos… pero también las hay muy concretas como Rocío Dúrcal, Jesús Hermida, el asesinato de Kennedy o el anuncio de Colacao. Muchos de ellos han señalado dónde la vieron: en casa de un familiar, en el bar de enfrente de casa o en el casino, contestaciones que reflejan que el acceso a la televisión tuvo lugar de manera paulatina hasta convertirse en un electrodoméstico imprescindible en cada casa.
Otro aspecto que se ha tratado es el relacionado con la comida. Comer es uno de los placeres de la vida y si este momento puede vivirse al lado de la familia, aún se disfruta más. Por tanto, no es de extrañar que el 87 % de los encuestados recuerden su comida favorita de la infancia. Cocido (17,6 %) y arroz o paella (17,5 %) son las preferidas. También las migas y los huevos fritos, todos ellos platos muy típicos de la gastronomía popular. La mayoría se decanta por lo salado, pero también los hay muy golosos. Entre los postre más referidos destacan el arroz con leche y el chocolate (5,6 %).