Desde el Ministerio de Transportes y los consorcios estiman que aumentará ligeramente el número de usuarios en la red de transporte. Sin embargo, con el objetivo de evitar cualquier posible complicación, las distintas compañías refuerzan las flotas o sus servicios de atención al cliente para ofrecer un servicio de calidad.
Esta medida debía haber entrado en vigor en junio de este año; pero como hubo que hacer una serie de reajustes, los tiempos se vieron alterados.
Se estima que los descuentos le supondrán, para el año que viene, un coste al Gobierno de, aproximadamente, 233 millones de euros.