La Organización Mundial de la Salud define la depresión como una enfermedad
que se caracteriza por una tristeza persistente y por la pérdida de interés en
las actividades con las que normalmente se disfruta, así como por laincapacidad para llevar a cabo las actividades cotidianas, durante al menos dos
semanas, estos son rasgos también reconocibles en un proceso natural deenvejecimiento. «Síntomas tan comunes como la fatiga, la falta de apetito o los
problemas para dormir, también pueden ser parte del proceso de envejecimiento o
de un padecimiento físico. Por lo tanto, la depresión temprana puede ser
ignorada o confundida con otras afecciones que son comunes en los adultos
mayores», explica el doctor Curto.
Las causas de depresión en personas mayores pueden ser endógenas o también externas. Entre las primeras, se encuentran enfermedades como la diabetes, el dolor crónico, la hipertensión, las cardiopatías, el párkinson o el ictus, o demencias como el alzhéimer. En concreto, «el deterioro cognitivo, que suele ser frecuente en las personas mayores, influye de manera determinante en el proceso diagnóstico al entorpecer la obtención de información», añade Curto.
Por otro lado, las causas externas se relacionan con trastornos de adaptación a circunstancias tan habituales como la jubilación, el duelo por la muerte de seres queridos, la dependencia funcional y las institucionalizaciones o cambios de residencia.
El cuidador tiene un papel fundamental en la prevención de la depresión. «Los familiares o profesionales de los centros de día o residencias que se encargan del cuidado diario de los mayores tienen una labor importante a la hora de detectar los primeros síntomas o en explicar al médico los problemas que el enfermo no expresa», comenta el doctor David Curto.
Otras labores de prevención que puede realizar el cuidador son controlar la alimentación, ayudar en la adaptación a los cambios, respetar las preferencias individuales de la persona, animarle con las relaciones sociales, alentarle para realizar ejercicio o fomentar que mantenga el contacto con sus familiares, en caso de que se encuentre ingresado en una residencia.