Se refuerza la plantilla de los centros y residencias para la tercera edad de Alicante

La Vicepresidencia y Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas tiene la intención de reforzar las plantillas de los profesionales de las residencias de la tercera edad y de los centros para personas mayores de la provincia de Alicante con 52 nuevas plazas de atención directa a lo largo de 2018.

El aumento de la plantilla está dentro de los planes de refuerzo de personal de los centro que dependen de la Generalitat. Para poder llevar este aumento, los presupuestos del 2018 han consignado 728 401 euros y se prevé que las nuevas incorporaciones empiecen a partir de julio. Los perfiles de los trabajadores abarcarán todos los aspectos con personal sanitario, administrativo, de servicios o directivos.

La mejora de ratios afecta a las residencias Pintor Sala de Alcoy, La Florida, Mariolam la residencia de Torrevieja, los Centros Especializados de Atención a Mayores (CEAM) de Pego, Callosa d'en Sarrià y en el de Castalla. En el caso de la Residencia Alacant, se crean un total de diez plazas con un presupuesto para este año de 142 869 euros que consistirán en tres enfermeros, un trabajador social, cuatro auxiliares de enfermería, un administrativo y un ayudante de mantenimiento.

Desde la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas se manifiesta que cuando se diseñaron las plantillas de personal para los centros estos no acogían a muchas personas mayores dependientes. Esta realidad ha cambiado y ahora hay un gran número residentes que presentan gran dependencia, por lo que se debe adecuar el número de profesionales a las nuevas necesidades de atención.

Alicante, a pesar de seguir siendo la quinta provincia más poblada de España con 1 823 332 habitantes, presenta un panorama de envejecimiento complicado, pues en el último año es la provincia que más habitantes ha perdido: 11 127 como indican los datos del Padrón d el Instituto Nacional de Estadística. Las causas son la caída de la natalidad y, sobre todo, la pérdida de atractivo como destino residencial para los extranjeros comunitarios. En cuatro años lleva acumulada descenso de población de 120 000 personas.

Los municipios que más pierden son aquellos que tradicionalmente más extranjeros tienen empadronados, mientras que los que su actividad es principalmente industrial mantienen e incluso aumentan levemente su población. La crisis económica ha hecho que la vida en la provincia de Alicante ya no sea tan atractiva para extranjeros de otras nacionalidades, sobre todo jubilados. Eso, unido al Brexit está provocando todo un éxodo de ciudadanos de la Unión Europa y sobre todo británicos.

Por otra parte, cada vez nacen menos niños en Alicante, que lleva ocho años de descenso consecutivos. Si sumamos el aumento de la mortalidad, tenemos que la provincia un saldo vegetativo negativo: entre enero y junio se produjeron 7062 nacimientos e frente a 8134 defunciones.