El paso del tiempo es inevitable, pero podemos prepararnos para lo que el futuro nos depare, tanto durante nuestra vida como después, a través de una buena planificación legal.
Es recomendable buscar el asesoramiento de un abogado de confianza antes de tomar cualquier decisión. Por lo tanto, las siguientes recomendaciones deben considerarse como orientaciones generales:
Prever la futura demencia
Aunque es posible que en el futuro se encuentre una cura, hoy en día la demencia senil, incluida la enfermedad de Alzheimer, afecta a muchas personas mayores, impidiéndoles tomar decisiones cuando la enfermedad avanza.
Si una persona sufre demencia y no puede gestionar sus asuntos, un juez, mediante el proceso de incapacitación, puede declarar la incapacidad y nombrar un tutor.
Sin embargo, si la persona, cuando aún tenía capacidad, ha sido previsora, puede haber realizado tres gestiones previas:
1. Autotutela
Consiste en que la persona acuda a un notario para indicar quién desea que sea su tutor o quién no quiere que lo sea, en caso de llegar a ser incapacitada. También puede dejar instrucciones específicas.
2. Voluntades anticipadas sobre tratamientos
También conocido como mandato de asistencia sanitaria, este documento permite a la persona nombrar a alguien para que tome decisiones sobre su salud en su nombre, en caso de que ya no sea capaz de hacerlo por sí misma. Es recomendable ponerse en contacto con las autoridades sanitarias de la comunidad autónoma para conocer el procedimiento para realizar esta declaración (Teléfono: 012).
3. Medidas de apoyo para las personas con discapacidad
A partir de la aprobación de la Ley 8/2021 en nuestro país y en las Comunidades Autónomas se han eliminado todas las instituciones que podían reemplazar o limitar la autonomía de las personas con discapacidad y el ejercicio de sus derechos. Estas instituciones incluyen: las tutelas, la potestad parental prorrogada y las curatelas.
Sin embargo, se mantiene la figura de la asistencia, la cual puede ser solicitada por la persona con discapacidad o impuesta judicialmente si la persona no puede expresar su voluntad o no dejó constancia de ella. En cualquier caso, para nombrar a un/a asistente, el juez o la jueza deberá considerar las preferencias y la trayectoria personal de la persona afectada.
Ante la muerte de un familiar
Hay algunos trámites que hay que hacer y pensar con antelación y después del deceso. (Más)