Castilla-La Mancha es una de las comunidades que más personas tenía en
lista de espera para incorporarse al sistema de dependencia, lo que se llama el
«limbo de la dependencia».
El problema se va solucionando de manera lenta, pero sostenida, en un
esfuerzo por recuperar el sistema que había sido paralizado cuando no,
directamente desmantelado.
En el mes de abril se han incorporado 416 personas, con lo que desde julio
de 2015 ya son 4 565 menos en la lista. Como beneficiarios nuevos hay 539 personas
más en el Sistema de Atención a la Dependencia, 3 506 personas más desde julio
de 2015
Para una mayor transparencia y para que los ciudadanos puedan estar
informados, la Consejería de Bienestar Social publica los datos los datos de
atención a la dependencia de la región en la web del gobierno regional, http://www.castillalamancha.es/tema/bienestar-social/dependencia, que se actualizarán
cada trimestre.
Otros interesantes datos del mes de abril muestran que hay 220 usuarios más
que reciben apoyos del Sistema de Ayuda a Domicilio, 1539 más de julio,
otros 149 más con teleasistencia, 660 más desde julio, 37 más en centros de
día, 353 desde julio, 154 más en plaza residencial pública, 660 desde julio, 54
más atendidos por el Servicio de Promoción de la Autonomía Personal SEPAP, 252
desde julio, 94 más con una prestación vinculada, 173 desde julio.
Otro punto importantes es el descenso, también en abril, de la lista de
solicitudes pendientes de valoración en 69, con lo que el acumulado desde julio
de personas pendientes de valorar ha descendido en 2976 personas.
Se han concedido 23 prestaciones económicas para el cuidado en el entorno
familiar (PECEF), que en el cómputo mensual ha descendido en 189 por fallecimiento o traslado del titulas de la prestación.
Es importante destacar que la ayuda a domicilio ha pasado de los 34
millones de euros en 2015 a lo 36 en 2016 y se han agilizado los trámites de
manera que se ha adelantado la firma de los convenios en cinco meses.
Son buenas noticias para las personas mayores dependientes de Castilla-La
Mancha, pues se trata de reconocer lo antes posible las prestaciones a las que
tienen derecho y que son fundamentales para su calidad de vida. Ponerse al día
en las integración en el Sistema de Dependencia puede parecer un simple trámite
administrativo, pero para la persona que espera y, en algunos casos fallece,
sin esa ayuda, es vital para poder acceder a una residencia
de mayores, tener ayuda en su casa para las actividades más básicas o poder
asistir a rehabilitación a un centro de mayores.