El objetivo del estudio es saber el número de personas mayores de 70 años que sufren pérdida de capacidad funcional e identificar con antelación los factores que pueden influir en ella y, de esa manera, prevenir una futura discapacidad. El fin último es poner en marcha actividades que retrasen la pérdida funcional y que aumenten los años de vida independiente de las personas mayores tanto si viven en sus domicilios como en residencias geriátricas.
El estudio pretende investigar la incidencia de declive funcional en ancianos acontecido a lo largo de un periodo concreto y, además, la utilidad de las distintas reglas de predicción clínica, a través de las cuales se calcula la posibilidad de que una persona pueda padecer en el futuro una enfermedad o, como en este estudio, una pérdida de sus capacidades a la hora de desenvolverse de manera cotidiana.
El estudio se llevó a cabo durante tres meses, en los que se avaluaron 462 pacientes procedentes de tres Zonas Básicas de Salud del Área Sanitaria de Atención Primaria de Toledo (Sillería y Santa María de Benquerencia en Toledo e Illescas) que presentaban con enfermedades crónicas, principalmente cardiacas, pulmonares y reumáticas. La edad media de los pacientes ha sido de 78 años y el 55 % eran mujeres. Como media, presentaban entre cuatro y cinco patologías y tomaban entre 5 y 6 medicamentos diarios.
El estudio revela que uno de cada tres participantes sufrió algún declive funcional en el transcurso de este periodo de tiempo, cifra que probablemente se deba a que se trata de personas que son pacientes ingresados o que acuden a los servicios de urgencias hospitalarios, no a personas sanas o que no acuden a estos servicios. Las capacidades más afectadas son de funcionamiento social o instrumental, como realizar llamadas por teléfono o controlar la medicación.
Una importante conclusión a la que se ha llegado es que las reglas de predicción clínica han demostrado ser poco útiles a la hora de establecer qué pacientes tiene más riesgo de sufrir declive funcional, por lo que hay que repensarlas.