El premio corresponde a la convocatoria del año 2015 y el acto de entrega tuvo lugar en el aula Salinas de la Universidad de Salamanca. Este interesante estudio ha sido publicado en la prestigiosa Revista Española de Geriatría y Gerontología.
El estudio de los dos investigadores se inició en el primer trimestre del
año pasado. Consistió en seleccionar 486 casos en Zamora (un 59 % del
total de la provincia) de los que el 86,8 % de ellos era mayor de 75 años y
tenía prescritos una media de 9,2 fármacos, en su mayor parte antidepresivos y
antipsicóticos.
El alzhéimer no tiene cura, pero se utilizan una variedad de medicamentos para paliar o aminorar los síntomas. En ocasiones, estos fármacos son incompatibles entre ellos y pueden favorecer efectos adversos sobre el sistema nervioso.
Así, tras localizar a posibles pacientes afectados por incompatibilidades, se proporcionó a los médicos la lista posible de pacientes afectados y las recomendaciones pertinentes para mejorar el tratamiento. La intervención de los médicos tras recibir la información dio lugar a un estudio comparativo en el mes de julio donde se comprobó que la interacción entre medicamentos había desaparecido en 155 de los 486 casos estudiados, una cifra muy relevante que mejoró la calidad de vida de los pacientes afectados.
Esta es la segunda vez que estos investigadores ven recocido su trabajo, pues el año pasado la Academia de Farmacia de Castilla y León les premió por un estudio que evaluaba los riesgos de determinados fármacos que podían provocar arritmias ventriculares.