Cataluña, junto con Canarias, tiene las listas de espera con más número de
personas con dependencia que esperan su prestación.
Según el informe de la Asociación Estatal de Directores y
Gerentes de Servicios Sociales, elaborado a partir de datos
proporcionados por el Ministerio de Sanidad y por las propias comunidades
autónomas, en el conjunto de España, hay 381 508 personas en lista de
espera (el 31,6 % del total de personas con dependencia). De ellas, Cataluña registraba en julio 90 221 personas (el 41,7 %
de la demanda en el territorio) esperando para acceder auna residencia
pública o concertada, a centros de día, aservicios de ayuda a domicilio o
a la prestación de cuidados a un familiar.
Para entender el problema, si el número de dependientes no
aumentara (1,2 millones actualmente en toda España), al ritmo de
resolución de solicitudes actual, se acabaría con la lista de espera en 4 años,
pero esta es la proyección media, según el informe, en Cataluña se tardaría la
escandalosa cifra de 10 años, un 150 % más que el conjunto del Estado.
Cataluña es la única comunidad donde se han reducido el número de
beneficiados, 1 441 personas menos atendidas en un año. Según la Generalitat, cuando
una plaza queda libre se ocupa inmediatamente, sin embargo, desde Asociación
Estatal de Directores y Gerentes de Servicios Sociales se asegura que lo que
ocurre es que cuando fallece una persona dependiente, la plaza se amortiza y
eso es lo que ha pasado con las 1 441 personas dependientes fallecidas y ese el motivo por el que en Cataluña no
se pueden aliviar las listas de espera, porque en lugar de ocupar las plazas
que quedan vacías, se eliminan. Esta grave situación provoca que el sistema colapse
y que la gente fallezca mientras está en lista de espera.
Según información del propio Departament
de Treball, Afers Socials i Famílies, solo en espera de plaza en una
residencia pública o privada, en la Comunidad hay 24 000 personas
dependientes, siendo las de las comarcas
del Barcelonés (8 349) y Vallès Occidental (1 995) las más abultadas. Desde el
Departament se dice desconocer el tiempo de espera de las personas.
La Associació catalana de Recursos Assistencials
(ACRA), patronal que agrupa a 443 empresas y entidades, estima que
de las 57 000
plazas que hay en residencias, 5 000 pertenecen a centros
públicos, menos del10% y que los centros privados disponen de 8000
plazas vacías que se ocuparían si la Administración las subvenciona.
Los motivos de las listas de espera tan abultadas son, según el informe, el
primero y más importante pues es a nivel estatal, los recortes acumulados por
el gobierno del Partido Popular, cifrados en 3 000 millones desde el 2012.
En segundo lugar, en el caso de Cataluña, por la paralización de las políticas
sociales del Ejecutivo de la Generalitat de convocatorias
electorales.
Acra señala que de las 57 000 plazas que hay en Cataluña, 32 000
están financiadas en alguna medida por la Administración. Una plaza en un centro
privado cuesta una media de 1.850 euros (según el informe de precios de residencias privadas de Inforesidencias.com), hace unos años, los usuarios
percibían unos 1 000 euros de subvención si ocupaban una plaza en una residencia
privada. Actualmente esta ayuda se han reducido de manera notable y va de los 715
a 426 euros, según el grado de dependencia.