Según datos de la propia Diputación de Lugo, para cumplir con las recomendaciones de la OMS, la provincia precisa de 3 850 plazas residenciales y 800 de centros de día más de las que ahora tiene. Este informe indica que, a día de hoy, el 76 % de las plazas residenciales que hay (2 597 de 3 399) están concentradas. Con respecto a los centros de día, el 53 % de las plazas (615 de 1140) son privadas.
Según la Diputación, la apertura de los centros significará 150 plazas en residencias y 100 en centros de día, que propiciarán la creación de 50 empleos. Unos números claramente insuficientes.
La Diputación, en el informe antes mencionado, propone una inversión de 15 millones en centros de la tercera edad que se repartirían en 7,8 para los ya construidos, 1,2 para las residencias en construcción de Ribas de Sil, 4,8 para construir centros en Navia de Suarna, Guitiriz, Meira y O Saviñao.
Para este año los presupuestos incluyen 1,5 millones de euros para la construcción de centros de mayores en Portomarín, Folgoso do Courel y Becerreá.