Se trata historia que, a través del humor, ahonda en la soledad y la incomunicación de los miembros de una familia. Se trata de un expresivo e impactante trabajo sin palabras hecho con máscaras.
El anciano protagonista de Solitudes,
tras perder a su esposa, se siente incomprendido porque, como casi todas laspersonas mayores para las que su vida es prácticamente una espera, ya solo
desea cosas sencillas. Cosas tan simples, que los demás no llegan a valorar su
verdadera importancia. Lo extraordinario de esta historia es que el anciano
—contra lo que podría esperarse de alguien con una vida ya casi sin alicientes—
no se resigna, no renuncia a sus pequeños deseos y pelea por ellos con
determinación y dignidad. Esto, claro, tendrá sus consecuencias para él mismo y
para quienes le rodean.
Los tres actores interpretan a 15 personajes con 18 máscaras, con un trabajo arriesgado sin diálogos y lleno de sensibilidad.
La compañía Kulunka Teatro nació en 2010, en Euskadi, de la iniciativa de Garbiñe Insausti y José Dault, jóvenes pero experimentados artistas de extensa trayectoria teatral y con inquietudes por experimentar con diferentes lenguajes escénicos. Todo ello, sin olvidar la idea de hacer un teatro accesible para el público. Un teatro vital, actual, comprometido y conectado con la realidad.
Crean espectáculos sin fronteras que ya les ha llevado a 30 países, a través de teatro gestual donde la máscara abre la imaginación y transciende la palabra.
Una buena propuesta para estas tardes de otoño, salir de casa o de la residencia para mayores para disfrutar de esta estupenda obra de teatro.