El anuncio de la puesta en funcionamiento por parte de la administración autonómica de Murcia (Issorm) de siete nuevas residencias, algunas aún por inaugurar, en Calasparra, Villanueva, Lorca, Abarán, Águilas, Jumilla y San Pedro, hará reducir la lista de espera que actualmente se situa en unas 900 personas y cambiará también el perfil del sector en esa autonomía que dispone en estos momentos de 40 geriátricos, 26 públicos y 14 privados, que suman algo más de 3.000 plazas.
Esta es la información que apareceen la edición digital de La Verdad de Murcia el 7 de Septiembre de 2003.
La entrada en funconamiento de esas residencias supone un incremento del 50% en el número de residencias públicas.