El uno de febrero la Ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, ha comparecido para comunicar las líneas de actuación de su departamento.
Según leemos en la web del Ministerio, Mato se ha comprometido a mantener la Ley de Dependencia, "un avance al que no podemos renunciar” . Sin embargo, ha constatado el "fracaso” del modelo de financiación . Por ello, ha anunciado "una evaluación profunda y rigurosa” de la norma, que elimine desigualdades en su aplicación y de la que salgan propuestas que garanticen su viabilidad, y que las prestaciones lleguen antes a quienes más las necesitan.
La ministra ha explicado, además, que en el acuerdo que planteará a las Comunidades Autónomas, incluirá la propuesta de un catálogo de prestaciones en servicios sociales, que determine cuáles son las prestaciones a las que pueden acceder los ciudadanos en el conjunto del territorio, así como los requisitos y condiciones para acceder a ellas . En este sentido, la ministra planteará unos criterios comunes básicos.
O sea, que la forma de mantener la Ley que plantea la Ministra consistirá, en la práctica, en una reforma a fondo de la misma.