Los profesionales de la animación sociocultural se han consolidado como figuras indispensables en los centros residenciales de DomusVi. Su trabajo, más allá del entretenimiento, consiste en ejercitar la motivación y estimulación de las personas mayores para fomentar una participación activa en las actividades de ocio y así, impulsar la sociabilización, mejorar el desarrollo personal, la cooperación entre compañeros y la adaptación al entorno en el que viven, todos ellos, aspectos relacionados con una buena calidad de vida.
Participar en estas dinámicas contribuye a prevenir la desorientación tanto temporal como espacial, a disminuir la pasividad de los residentes y mejorar su vida social, evitando el aislamiento y la soledad. Así mismo, permite trabajar la independencia y la autonomía con tareas que deben ser desarrolladas por ellos mismo, sin olvidar que a cualquier edad, pero en especial entre el colectivo de las personas mayores, es necesario sentirse útil, sentirse parte de un grupo, por ello, se estimula la cooperación que, a su vez, ayuda a mantener la autoestima y reforzar su identidad.
Con la animación sociocultural actividades como jugar a juegos de mesa, al bingo y a las cartas, participar en talleres de manualidades, de reminiscencia, de pintura, de manicura, en concursos de varios tipos, excursiones, cine-forum… adquieren una nueva dimensión que permite ofrecer un aporte tanto físico como psicológico a los residentes. Beneficios que también se reflejan en el día a día de la residencia, ya que, crean vínculos entre los residentes y en consecuencia un entorno más feliz y optimista.