Desde la Sociedad Española de
Geriatría y Gerontología (SEGG) nos llega una importante información
que consideramos debe difundirse, pues afecta a mucha población mayor que, en
gran medida, lo desconoce.
La diabetes afecta en la
actualidad más de 5 millones de españoles (14 %), y de los nuevos
diagnosticados el 40 % son personas mayores de 65 años, según datos de
la (SEGG).
En los mayores de 70
años el porcentaje de prevalencia supera el 15 % y se calcula que, en la
actualidad, el 50 % de los ancianos que padecen diabetes desconocen su
enfermedad.
La obesidad, el exceso
de grasa abdominal y el aumento de peso y la disminución de ejercicio físico
que se produce a partir de los 50, propician un mayor riesgo de padecerdiabetes.
En las personas de mayor
edad la diabetes presenta unas manifestaciones atípicas que dificultan su
diagnóstico. La SEGG, con motivo del Día Mundial de la Salud, que se celebra el 7 de abril y está
dedicado a la diabetes, aclara que la valoración geriátrica integral es
indispensable para evitar que la enfermedad puede pasar desapercibida.
La diabetes es unaenfermedad grave que se presenta cuando los niveles de glucosa en la sangre son
muy altos. Puede causar problemas de salud de alto riesgo (hipoglucemias,
problemas cardiovasculares, patologías oculares, daños en el riñón, etcétera)
que se agravan en las personas mayores. De hecho, según explica el Dr. José Antonio López Trigo, presidente de
la SEGG, «la diabetes es una enfermedad que aumenta con la edad y el 40 % de los diagnosticados de diabetes son mayores de 65 años». Se espera que los afectados por esta dolencia se incrementen
sobremanera en los próximos años debido a la proliferación de algunos hábitos
de vida poco saludables como el sedentarismo o a patologías como la obesidad.
A pesar de la
prevalencia creciente de la diabetes, es bueno saber que los altos niveles de
glucosa en sangre pueden ser controlados para ayudar a contrarrestar la enfermedady prevenir o retrasar la aparición de problemas en el futuro. Pero este control
no sucede en todos los casos, ya que «en la actualidad la mitad de los ancianos
diabéticos desconocen que lo son, por lo cual no están tratando su enfermedad,
y esto aumenta el riesgo de deterioro funcional», según explica el Dr. López Trigo, «muchos de estos
ancianos sin diagnosticar están sufriendo problemas de salud que achacan a los
años. Esto puede ser debido a enfermedades que no estén bien tratadas,
entre ellas, la diabetes,que además presenta el problema añadido de ser,
en muchas ocasiones, silente en sus manifestaciones».
Además, al deterioro
funcional que sufren los mayores con diabetes se suma un cierto grado de deterioro cognitivo debido a la neurotoxicidad
causada por la hiperglucemia, la hipoglucemia, la insulina o por los productos
glicosilados, lo que complica aún más si cabe el problema.
El paciente ancianotiene unas características particulares que hacen que controle peor su
enfermedad, ya que el deterioro
funcional y el cognitivo empeoran
sustancialmente su calidad de vida y ello tiene una repercusión directa y
negativa en la evolución de la diabetes. Algunos pacientes ancianos
con deterioro cognitivo pueden no entender bien las bases del tratamiento y no
saber qué hacer ante la aparición de una complicación, por ejemplo, una
hipoglucemia. Asimismo, tienen, además, más riesgo de errores en la medicación
(por ejemplo, pueden administrarse un exceso de insulina).
Un mal control de la enfermedad
puede llevar a la aparición de complicaciones microvasculares (retinopatía,
neuropatía y nefropatía) y macrovasculares (circulación vascular periférica,
arterosclerosis en deterioro carotídeo o coronaria).
Otras circunstancias que
pueden dificultar el manejo de la diabetes en el paciente mayor pueden
serel empeoramiento de la agudeza
visual, la depresión, los problemas sociales o la limitación del acceso a
comidas equilibradas.
Además, los pacientes
diabéticos usan el doble de recursos tanto hospitalarios como
extrahospitalarios que los pacientes no diabéticos. Los pacientes de más de 75
años presentan mayores tasas de mortalidad que los pacientes del mismo grupo
sin diabetes.
Recomendaciones de la SEGG para el mayor
diabético:
- Es necesaria una
educación continua de la familia, cuidadores y personal de medios
residenciales.
- Las instrucciones
al paciente mayor diabético deben ser simples.
- El tratamiento
del anciano debe ser individualizado. Hay que tener en cuenta si padece
deterioro cognitivo y deficiencias sensoriales.
- Se recomienda la
práctica de deporte: preferiblemente ejercicios de resistencia como caminar o
bicicleta. El ejercicio aeróbico es beneficioso para retrasar la aparición de
la diabetes y para mejorar la resistencia a la insulina en aquellos con la
enfermedad establecida.
- Se aconseja lapérdida de peso, ya que incluso leves pérdidas aportan beneficios.
- Es recomendable
la reducción de los factores de riesgo cardiovascular, incluido el tabaquismo.
- Los
sistemas de alarma colgantes o en domicilio pueden resultar de gran utilidad
para controlar al anciano diabético.
- Es necesario que
los mayores diabéticos se sometan a una revisión anual. En los ancianos
frágiles o muy dependientes, los controles deben ser frecuentes para asegurarse
que los tratamientos son los apropiados y no presentan reacciones adversas.
- La dieta debe ser
controlada (sobre todo es necesario reducir las grasas), al igual que el resto
de fármacos que tomen (polimedicación).
- Se debe vigilar
el aumento de peso, la tensión, la microalbuminuria (signo precoz de
nefropatía), los pies y la glucosa periódicamente.
- Los test
urinarios de glucosa son menos fiables, ya que en este grupo de pacientes el
umbral renal glucémico se encuentra alterado.
La Sociedad Española de Geriatría y Gerontología es
una de las sociedades europeas más numerosa y activa. Actualmente cuenta
conmás de 2 450 socios de
áreas multidisciplinares: médicos (especialistas en geriatría, en
atención primaria, etcétera), sociólogos, diplomados en enfermería,
trabajadores sociales, psicólogos, pedagogos, terapeutas, ocupacionales,
fisioterapeutas, geógrafos, arquitectos, economistas, farmacéuticos…