La natación, fuente de bienestar también en la tercera edad

19/09/2015

Aunque parezca difícil de creer, cuando en Inforesidencias decidimos renovar el portal y hablamos para ello con muchas personas mayores y profesionales preguntándoles qué buscarían en una residencia geriátrica, algunos nos dijeron que valorarían mucho que tuviese una piscina donde poder nadar o sencillamente "estar en remojo".  Lo cierto es que, aunque no son demasiadas, hay residencias de tercera edad que tienen piscina y otras que organizan salidas de los residentes a piscinas externas.
 

La natación es fuente de salud también en la tercera edad

 
Natación en ancianos para mejorar la calidad de vidaLa natación se considera una de las actividades físicas más completas, pues en ella se pone en funcionamiento todo el cuerpo, por lo que es un deporte que practicado en su justa medida mejora la salud en general.  Apuntarse a unas sesiones de acuagym, natación o, simplemente, estar un rato en la piscina nadando y flotando a nuestro antojo es un ejercicio que repercute positivamente incluso en nuestro bienestar emocional. Por eso es recomendable completar los ejercicios habituales con unas sesiones semanales de actividades acuáticas. Muchas residencias geriátricas incorporan piscinas en sus instalaciones u organizan esta actividad en algún centro polideportivo cercano.
 
El principal motivo del bienestar inmediato que proporciona el agua es que en ella la persona se siente más ligera, por lo que se puede mover con mayor facilidad y se siente más motivada. De hecho, algunos de los problemas más frecuentes en la tercera edad como los dolores articulares o musculares desaparecen o se atenúan es estamos sumergidos con el agua. También, al ser un deporte aeróbico mejora el funcionamiento del corazón y reduce la tensión arterial. También fortalecen los pulmones, pues se hacen ejercicios respiratorios.  
 

Actividades específicas para personas mayores en el agua

 
Hay que tener en cuenta que en el agua los músculos trabajan de cinco a seis veces más que en tierra firme, sin que suponga un esfuerzo inasumible. Por estas razones, las tablas de ejercicios acuáticos son muy importantes en ciertos tratamientos rehabilitadores. La repetición de series de ejercicios y el entrenamiento en la coordinación necesaria es también una buena manera de reforzar la memoria.  Esta actividad, además, es propicia para ser practicada de forma lúdica, por lo que puede mejorar el estado de ánimo, el estrés y las relaciones sociales.  Para que salga bien y evitar lesiones o problemas, siempre las personas mayores deberán ponerse en manos de un entrenador especializado y seguir un programa adecuado a sus posibilidades e intereses. Muchos polideportivos, centros de mayores y residencias de tercera edad organizan sesiones de actividades acuáticas específicas para ancianos. En ellas, profesores especializados diseñan tablas de ejercicios adaptados. Animamos a todas las personas mayores a que se apunten a natación, notarán mejoras en su salud y en su estado de ánimo en general.
 
Más información en la web de la Fundación del Corazón 
La fotografía corresponde a una entrada en un blog del New York Times de 2009 en el que se trata de los diferentes tipos de residencia geriátrica que van apareciendo y cómo se adaptan a las personas.

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