Un reciente estudio de la Facultad de Medicina Albert Einstein
de la Universidad Yeshiva en Nueva York (EE. UU.) y publicada en la revista Neurology, señala
que, al menos en cuanto a memoria verbal y durante las primeras fases de la
enfermedad, la pérdida de memoria no es igual en los hombres y en las mujeres. Es
una importante conclusión, pues obliga a replantearse las pruebas de
diagnóstico y diferenciarlas según se apliquen a una mujer o a un varón. 
Erin E. Sundermann, director de esta investigación, señala que las mujeres tienen a lo largo de su vida una mayor capacidad de memoria verbal, lo que les otorga una pantalla que puede enmascarar el deterioro cognitivo leve que se manifiesta al inicio de la enfermedad. De esta manera, los test que ahora se utilizan para los dos sexos pueden resultar de poca utilidad en las mujeres para detectar ese daño y el alzhéimer, lo que llevaría al diagnóstico cuanto la enfermedad está ya en fase avanzada.
Para hacer el estudio se contó con 235 personas diagnosticadas de enfermedad de Alzheimer, 694 con deterioro cognitivo leve que presentaban problemas de memoria, y 379 voluntarios sanos sin problemas de memoria o de razonamiento.
Tras evaluar las pruebas, se compararon los resultados con el volumen del hipocampo de cada participante, es decir, con el área responsable de la memoria verbal que, en las primeras fases de la enfermedad de Alzheimer ya muestra un tamaño más reducido.
Este estudio tiene gran interés a la hora de detectar la enfermedad en las personas de nuestro entorno. Para los profesionales de la geriatría o trabajadores de centros de día o residencias de mayores puede ser muy interesante tener en cuenta que no siempre en las mujeres conservar la memoria verbal es sinónimo de ausencia de deterioro cognitivo, lo que ayudarles en la observación y el diagnóstico precoz de la enfermedad.
Enlace de interés; Vivir con una persona con demencia