Algunas investigaciones afirman que los gatos son buenos para combatir el
estrés gracias al su ronroneo, que transmite el bienestar del animal cuando
emite su sonido a la persona que lo provoca con sus caricias o mimos.
Los gatos, siempre que no sean ariscos o muy independientes, unen todas las ventajas que dan el tener una mascota: tener una ocupación y responsabilidad, compañía, aumento de la autoestima, etc. que no necesitan salir del domicilio o residencia para sentirse a gusto, hacer ejercicio o sus necesidades, por lo que son muy adecuados para personas con problemas de movilidad.
Los amantes de los gatos aseguran que con su presencia mejoran la salud física y mental de sus dueños, pues obliga a cierta actividad física, es relajante y reconforta en convalecencias y ayuda a verbalizar emociones pues es un interlocutor al que se le puede contar los problemas sin que lleve la contraria.
Ver vídeo sobre gatitos en residencias