Las personas mayores de Extremadura podrán contar con un asistente virtual

La Junta de Extremadura participa en el proyecto Movecare, que se inserta dentro del más amplio programa para la Investigación y la Innovación de la Unión Europea Horizonte 2020.

Se trata de una propuesta de atención virtual y monitorización de las personas mayores en su domicilio que se desarrollará durante tres años y que cuenta con un presupuesto total de 6 millones de euros totales, de los que la Junta de Extremadura aportará 404 137.

Estos programas de investigación, al ser financiados por la UE, tiene como requisito que participen en ellos al menos tres países europeos que establezcan contactos y alianzas estratégicas entre ellos.

El proyecto Movecare está liderado por la Universidad de Milán (Italia) y en él se integran entidades de Suecia, Chipre, Eslovenia, Inglaterra o Francia. En España, además de la consejería de Sanidad y Políticas Sociales de la Junta de Extremadura, están el Centro Tecnológico de Cataluña y la Universidad de Málaga.

En el caso extremeño, participan el Servicio Extremeño de Promoción de la Autonomía y Ayuda a la Dependencia (SEPAD), el Servicio Extremeño de Salud (SES) y a la Fundación para la Formación e Investigación de los Profesionales de la Salud de Extremadura (Fundesalud), todos ellos pertenecientes a la consejería de Sanidad y Políticas Sociales, que definirán las características específicas del sistema, las demandas de los futuros usuarios y el posterior control en las áreas controladas por el SEPAD, en una decidida apuesta por promover la internacionalización del sector biomédico, sanitario y de la dependencia en Extremadura. Una muestra es que ha presentado 18 propuestas de convocatoria de proyectos de investigación, figurando como líder en 4 de ellos.

El proyecto de domótica Movecare pretende desarrollar una herramienta de cuidado y atención domiciliaria a personas mayores a través de un asistente virtual robotizado. El sistema proporciona un servicio de monitorización personal que deriva en asistencia e intervención cuando se solicita o se detecta información cuantitativa del estado de salud física o detecta riesgo deterioro cognitivo. Es, en definitiva, un robot de servicio que, a través de un centro de actividades adaptado al estilo de vida y estado de salud de cada usuario, proporciona detección temprana de riesgos, le guía en sus actividades, ayuda en tareas cotidianas recordando medicación o actividades o recomienda una dieta adecuada. También está conectado a una comunidad de usuarios que conecta a las personas mayores con personas de referencia, con lo que se apoya la socialización y palía la posible soledad.

Avanzar en herramientas que favorezcan la independencia no solo retrasa la entrada en residencias geriátricas, también, en un futuro, pueden ser una ayuda en los centros para mayores.

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