El suceso tuvo lugar en una residencia en Murcia, donde un paciente con alzhéimer en fase avanzada sufrió una caída en la que se fracturó una muñeca. Ante el hecho la familia ha puesto una denuncia que se está investigando por parte del juez correspondiente.
Sin entrar en si se tomaron las medidas oportunas y fue un accidente o si hubo algún comportamiento negligente, sí es importante señalar que muchas veces es inevitable que, a pesar de los controles, surjan incidencias y que estas deriven, en ocasiones, en accidentes de mayor o mejor gravedad.
Es importante que los protocolos de seguridad se cumplan, para tranquilidad de residentes, familias y los propios trabajadores y gerencia de los centros; que cuando ocurra alguna incidencia, ésta sirva para aprender y tomar medidas para que no se repita y también es importante que las familias sepan que pueden comunicar al centro las circunstancias en quei consideren que el trato hacia la persona mayor no ha sido el adecuado.
Siempre existe la posibilidad de presentar una denuncia aunque la verdad es que, tratándose la estancia en una residencia de una situación basada en la confianza, casi siempre resultará más conveniente resolver los problemas con el centro o cambiar de centro.
Aunque la relación se basa en la confianza mutua entre el centro, los residentes y sus familiares, no está de más estar vigilantes y auejasrse si se cree que no se ha actuado de forma correcta, eso redundará en la mejora de la atención y en la tranquilidad de todos.
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