Viviendas tuteladas para personas mayores. La experiencia llega a Paraguay

Las viviendas tuteladas para la tercera edad 

  

Desde Paraguay nos ha llegado la noticia de la apertura de una vivienda tutelada para personas mayores, lo que nos ha hecho plantearnos cómo se contempla esta solución residencial en España. 

 

La vivienda planteada en Paraguay se denomina «hogar tutelado» y tiene catorce plazas destinadas a personas mayores en situación de abandono y depende del Ministerio de Salud, que es quien la ha habilitado. El modelo es pionero en el país y busca que los residentes sean autónomos, aunque bajo la tutela de profesionales que guiarán y supervisarán la convivencia. 

 

En España esta experiencia lleva unos años funcionando y las empresas ofrecen viviendas para mayores que reciben diversos nombres: apartamentos tutelados, viviendas adaptadas, viviendas con servicios…  

 

Estos alojamientos ya tienen una trayectoria de años en otros países de la Unión Europea y aquí el interés en ellos es cada vez mayor.  

 

Las viviendas tuteladas se destinan a personas con autonomía física y psíquica, pero que tienen dificultades para seguir en su residencia habitual. Las viviendas pueden ser para una persona, una pareja, u otro tipo de unidad familiar y están bajo tutela de los servicios sociales. Pueden ser de carácter público o privado y, en el primer caso, suele ser el ayuntamiento correspondiente quien se hace cargo del funcionamiento y bienestar de los residentes, encargándose del mantenimiento, comida, seguridad y atención médica. 

 

Los residentes de las viviendas deben asumir tareas propias del hogar, poder realizar las tareas básicas como aseo y desplazamiento por sí mismos y no presentar problemas de convivencia. Además, las viviendas no deben tener muchos usuarios, pues un número elevado de personas puede aumentar los conflictos.  

 

El objetivo de este tipo de viviendas es que las personas mayores lleven el más tiempo posible una vida autónoma, con apoyos y un sistema que favorezca la convivencia y las habilidades cotidianas y la capacidad de las personas mayores, evitando la soledad y el desarraigo, además de la temida institucionalización que les aparta de su vida social.  

 

El personal de apoyo es fundamental para solucionar problemas de convivencia o de intendencia. Lo deseable es que sea un equipo multiprofesional que apoye en las facetas que más se necesita en cada hogar, que es único. 

 

Volviendo a Paraguay, también se plantean el asunto de que es un servicio más barato que los modelos gerontológicos que ya tienen, pues las personas mayores pueden manejarse solas y solo necesitan algo de ayuda en algunas cosas determinadas, lo que les lleva a que, si la experiencia funciona, pueda repetirse en otros sitios. 

 

Es muy interesante observar cómo en diferentes sitios se desarrollan servicios de características similares, para poder aprender unos de otros. Las viviendas para mayores son una realidad en España que no solo cubre necesidades de personas con problemas de integración, sino que también son demandadas por familias o por las propias personas que creen que es la mejor solución para una vida autónoma de calidad cuando ya hay algunos aspectos que deben ser vigilados.  

 

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Sobre la imagen:  La imagen es de la noticia aparecida en el periódico digital paraguayo ABC