Nutrición y bienestar en personas mayores

Hoy contamos como bloguista invitado al Grupo la Vostra Llar. Este grupo de residencias, de fuerte implantación y reconocimiento en Cataluña, nos ha hecho llegar este interesante articulo sobre nutrición y bienestar en personas mayores:

Mantener una alimentación equilibrada es esencial en cualquier etapa de la vida, pero en la vejez adquiere una importancia aún mayor. Una dieta adecuada ayuda a prevenir enfermedades, fortalece el sistema inmunológico y mejora el bienestar general. En las residencias y centros de día de La Vostra Llar, ofrecemos 11 menús adaptados a las necesidades nutricionales, alergias y dificultades de deglución de los residentes, garantizando que cada persona reciba una alimentación óptima y segura.

¿Qué es la hiporexia?

La hiporexia es la disminución del apetito en la tercera edad. Aunque es un problema frecuente, no se considera una enfermedad en sí misma. Puede estar causada por diversos factores, que suelen dividirse en dos grandes grupos:

  • Factores psicológicos: estados emocionales como la depresión, el duelo, la ansiedad o el estrés pueden reducir el interés por la comida.
  • Factores fisiológicos: enfermedades crónicas, problemas bucodentales, efectos secundarios de algunos medicamentos o cambios en el metabolismo pueden hacer que el hambre disminuya progresivamente.

Consecuencias de una alimentación deficiente en la vejez

Si una persona mayor deja de consumir los nutrientes necesarios, su salud se verá afectada. La desnutrición puede provocar:

  • Pérdida de peso y debilidad muscular.
  • Mayor riesgo de infecciones por un sistema inmunológico debilitado.
  • Falta de energía y disminución del estado de ánimo.
  • Peor calidad de vida y menor autonomía.

Recomendaciones para estimular el apetito en personas mayores

  1. Adaptar la alimentación a sus gustos: conocer sus preferencias facilita que coman mejor, incluso fuera de los horarios convencionales.
  2. Incorporar bebidas nutritivas: complementos como batidos naturales o caldos pueden aportar vitaminas y minerales esenciales.
  3. Ofrecer alimentos densos en nutrientes: incluir opciones energéticas en pequeñas cantidades, como yogur con frutas y frutos secos.
  4. Reducir las raciones y aumentar la frecuencia: repartir la ingesta en varias comidas pequeñas a lo largo del día favorece la alimentación.

5 opciones de comidas apetitosas y nutritivas

  1. Sopas y purés: fáciles de consumir y ricos en vitaminas y minerales.
  2. Pescado al horno con verduras: fuente de proteínas y omega-3.
  3. Batidos naturales: combinación perfecta de frutas y vegetales.
  4. Estofados caseros: platos completos y reconfortantes.
  5. Avena con frutos secos y miel: desayuno energético y digestivo.

Un enfoque adecuado en la alimentación de las personas mayores puede marcar la diferencia en su bienestar diario. ¡Pequeños cambios pueden suponer grandes beneficios!

Comentarios cerrados.