Música y musicoterapia en residencias, algo original

La música tiene un gran poder más allá del deleite que produce escucharla. Musicoterapia.

Escuchar música y hacer música puede ser una fuente de bienestar, especialmente en personas que sufren deterioro cognitivo.

Algunos tipos de música calman, fomentan la comunicación y apoyan emocionalmente a los mayores.

Con estos principios en mente algunas residencias ponen en marcha programas de musicoterapia.

En la visita a la Feria Altenpflege (Hannover marzo de 2016) que hemos organizado en Inforesidencias.com, hemos tenido la oportunidad de conocer en persona algo muy interesante. Se trata de una empresa (Allton) que desarrolla y fabrica en Alemania herramientas y muebles para potenciar el uso de la música como parte de la terapia de atención en residencias de mayores. Si quieres información sobre otros viajes geroasistenciales que vamos a organizar entra aquí.

Lo primero que llama la atención del Stand de Allton en la Feria son dos llamativos muebles. Uno es un sillón mecedora con aspecto de confesionario que tiene acopladas a cada lado y por el exterior una serie de cuerdas en forma de arpa.

La silla se mece mientras el arpa que tiene en la parte posterior transmite los sonidos de forma envolvente y la vibración en la espalda.

Por supuesto, pido una demostración y lo que sucede cuando te sientas en el asiento envolvente y el encargado del stand se pone detrás de ti, es una experiencia cuasi angelical.   Las cuerdas de arpa que hay a cada lado tienen sólo dos notas, una más grave y otra más aguda que, al ser tocadas se reparten por la madera envolvente y te llegan por todas partes. Como la silla se puede mecer, el ir delante y atrás a la relajante música una agradable sensación de ingravidez. Total que, cuando llevas unos segundos, solo tienes ganas de que el terapeuta no deje de tocar y mecer.

Los profesionales de Allton nos hablan del positivo efecto que tiene el sillón/arpa para personas mayores, con o sin deterioro cognitivo.

Seguimos por el stand y vemos unos cuencos metálicos que pueden tocarse con unas baquetas de goma y “siempre suenan bien”. El secreto es que están afinados con una escala pentatónica que produce notas armónicas. El cuenco se sitúa encima de una esterilla que transmite las vibraciones hacia quien coloque sus manos encima de forma que, como si de sinestesia se tratase, “palpas la música”. El resultado, otra sensación relajante, con utilidades para los terapeutas que trabajan en residencias.

Esta mecedora permite «sentir» la música en forma de vibraciones que se transmiten por la espalda.

El plato fuerte del stand es una especie de “tumbona sensorial”. Una especie de cama mecedora ergonómica en la que, una vez te estiras empiezas a escuchar una música relajante que te llega a través de los oídos y de toda tu espalda y piernas, mientras todo tu cuerpo se mece añadiendo una sensación de “presión cambiante” muy agradable. El motivo es que todo el mueble vibra al ritmo de la música.   Como en el caso del “sillón arpa”, no tienes ganas de levantarte.

Hablo un rato con los representantes de Allton y me explican que el sillón y la tumbona tienen un precio que ronda los 3.500 Euros cada uno pero que tienen muchas otras opciones y productos de musicoterapia. También ofrecen formación para los terapeutas que vayan a aplicar el sistema,

La escala pentatónica resulta muy relajante para mayores y jóvenes

Pienso seguir en contacto con ellos a ver si, en algún momento se plantean estar en España ya que, de momento, ni siquiera tienen traducida su web a otro idioma salvo el alemán.

Creo que algunas residencias que tienen salas de estimulación cognitiva considerarían ampliarlas con una zona específica de musicoestimulación.

Salgo del stand de Allton bien relajado.

Enlace al folleto de Allton sobre productos y servicios dirigidos a residencias de mayores

http://www.allton.de/branchen/senioren-pflege/