Pérdida de audición en la tercera edad

La pérdida de audición es un problema común que puede afectar a personas de todas las edades, pero se vuelve más prevalente en la tercera edad. Es por ello que con el envejecimiento de la población, es importante conocer los desafíos que enfrentan las personas mayores en relación con su audición. La pérdida de audición puede tener un impacto significativo en la calidad quienes la padecen, afectando su comunicación, interacción social y bienestar emocional.

Principales causas

La pérdida de audición relacionada con la edad, también conocida como presbiacusia, es el tipo más común de pérdida de audición en las personas mayores. Se produce gradualmente debido al desgaste natural de las células sensoriales del oído interno a lo largo del tiempo. Hay además otros factores que pueden contribuir a ese deterioro o pérdida. Un ejemplo claro que todos conocemos es la exposición prolongada a ruidos fuertes a lo largo de la vida. No obstante, hay otros menos conocidos pero igual de relevantes como la toma de medicamentos ototóxicos o algunos factores genéticos que nos predisponen a sufrir pérdida de audición.

En lo que se refiere a las consecuencias, como comentábamos brevemente la principio, la pérdida de audición en la tercera edad puede tener efectos negativos en la vida diaria de esas personas y dar lugar a una dificultad a la hora de comunicarse que suele llevar al aislamiento social y la depresión si no se trata a tiempo. Es también importante señalar que no pocas veces se ha asociado ésta pérdida con un mayor riesgo de demencia y deterioro cognitivo. Esto nos da una idea de la importancia que tiene en nuestro día a día no escuchar bien.

lLista de residencias en España adaptadas para cuidar a personas con demencia

Por suerte, existen a día de hoy medidas y soluciones para abordar la pérdida de audición en la tercera edad. La primera y más importante es reconocer y aceptar la pérdida de audición como un problema real que necesita atención. Se recomienda que las personas mayores se sometan a pruebas de audición regulares para detectar cualquier pérdida auditiva y buscar tratamiento adecuado. Los audífonos o también llamados «sonotones» son una opción popular y efectiva para mejorar la audición en muchas personas mayores.

Por todo lo explicado es por lo que resulta tan importante reconocer los síntomas y estar atento a los signos tempranos de pérdida de audición. Para poner ejemplos concretos, nos referimos a Estos pueden la dificultad para entender conversaciones en entornos ruidosos, pedir a las personas que repitan lo que dijeron con frecuencia, aumentar el volumen de la televisión o la radio de manera constante y tener dificultades para escuchar sonidos como el timbre de teléfono o el canto de los pájaros. Ante la duda, y la presencia de los primeros síntomas, lo mejor es acudir a un especialista de la audición para que nos realice las pruebas que considere oportunas.

Relacionado también con las personas mayores, quizá puede interesarte:

Comentarios cerrados.