Mejorar la imagen de las residencias de personas mayores ¿Qué debe hacer el sector de la Dependencia?

Mejorar la imagen de las residencias de personas mayores es muy importante para todo en general. Pero especialmente para ganar una confianza que parece perdida y poder trabajar desde esa relación de entendimiento mutuo entre las empresas, públicas y privadas, y la sociedad para ofrecer un cuidado y una atención de calidad.

Entre está población que genera opinión pública están, lógicamente, los residentes y sus familiares.

La imaginación no tiene límites. Cualquier sugerencia es siempre bienvenida. Por eso aquí en Inforesidencias.com presentamos algunas de las acciones más inmediatas de las que el sector de la Dependencia puede tomar buena nota:

Calidad de atención

Una Atención Centrada en el Paciente (ACP entre los profesionales y absolutamente desconocida para la sociedad en general) y una calidad de los servicios es vital. Hay que garantizar que se cumplan las mejores prácticas y estándares altos de cuidado personal.

El personal debe estar bien capacitado, formado, involucrado, ser amable y atento a las necesidades individuales de los residentes. Los trabajadores debe recibir una formación adecuada para lidiar con las necesidades específicas de los residentes mayores. Esto incluye el cuidado de personas con demencia o discapacidades cognitivas.

Transparencia

Insistimos, siempre ser transparente en cuanto a las políticas, procedimientos, costos y resultados de calidad es esencial. Esto genera confianza en las familias y en la comunidad en general. Publicar toda la información e, incluso, las inspecciones desde Sanidad y Servicios Sociales (omitiendo siempre datos personales) es beneficioso.

Esto ayudará igualmente a una evaluación regular de la calidad de los servicios y, con ello, tomar medidas para mejorar en función de los resultados obtenidos.

En Inforesidencias.com se da mucha importancia a este aspecto, tanto que puso en marcha un Índice de Transparencia que ayuda a los usuarios y sus familiares a conocer qué residencias son las que más información comparten y, por tanto, más confianza generan.

Comunicación real y efectiva

Mantener una comunicación regular y abierta con las familias de los residentes es clave. Proporcionar actualizaciones sobre el estado de salud de los residentes y asegurarse de que las familias se sientan involucradas en el proceso de atención lleva a esa confianza en las personas que cuidan de los que más queremos.

Limpieza y seguridad

Las instalaciones deben estar limpias y bien mantenidas. La seguridad de los residentes debe ser una prioridad, y las medidas de prevención de caídas y la accesibilidad para personas con movilidad reducida deben estar en su lugar.

Oferta de ocio, recreativa y social

Incluir actividades y programas recreativos que estimulen la participación de los residentes, promuevan la interacción social y ayuden a mantener una buena calidad de vida ayuda a lograr esa imagen de centro necesario y una sensación de acierto en las familias.

En este punto, no se puede perder de vista una sensibilidad cultural y por la diversidad. Es muy importante reconocer las necesidades específicas de los residentes y adaptar los servicios en consecuencia.

Respeto, dignidad y autonomía

Se torna fundamental, cada día más, fomentar la independencia y el respeto a la dignidad de los residentes. Por ello, hay que evitar restricciones innecesarias y fomentar la toma de decisiones dentro de las capacidades de cada persona. En este sentido, contar con las aportaciones de las familias es esencial.

Involucrar a la comunidad

La residencia está en la vida pública. Fomentar la colaboración con organizaciones locales, grupos de voluntarios y la comunidad ayuda a mejorar la percepción de la residencia.

Por todo esto, mejorar la imagen de las residencias de personas mayores no solo requiere de un trabajo constante y un modelo de atención centrada en el paciente, también es importante saber que hay que pagarlo. Son necesarios más recursos económicos y esto deben saberlo también las administraciones y la sociedad junto con las empresas.

Si las finanzas cuadran y las residencias se esfuerzan por proporcionar atención de alta calidad y se comunican de manera efectiva con las familias y la comunidad, es más probable mejorar la reputación. Entonces llega la confianza de quienes buscan servicios de cuidado a largo plazo por la imagen de las residencias es buena.

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