Brotar con sentido en geriatría

Hoy nos escribe Miguel Sagredo Echave-Sustaeta , historiador especialista en contemporánea por la UCB,  ex director de Residencia y consultor gerontológico. Formador e investigador de sentido de vida (logoterapia) en geriatria. Muchas gracias Miguel,

Hace años que me encargo del mantenimiento del pequeño jardín de casa. He de reconocer que cuando acepté esta responsabilidad , no me costó nada , pues siempre he percibido en el cuidado de las plantas algo mágico o casi me atrevería decir sagrado.

Los que tenéis gusto o afición por las plantas y habéis injertado, reproducido con semillas,.., replantado …. al ver luego el fruto de vuestro trabajo habréis experimentado el poder creador, el poder de dar vida a la naturaleza. Cada año con la llegada del mes de noviembre, como un rito ancestral y algo primitivo, me preparo para el trabajo de la poda. Antes de coger instintivamente las herramientas homicidas, pienso en los arboles que podaré este año, en las formas que intentaré lograr . Y cuando empiezo con el trabajo del corte, la poda, la tala, mi pensamiento está en el futuro, en la primavera en los logros florales que conseguiré. Este potencial de regeneración, brotación, floración…me fascina.

Las consecuencias de una gran poda o tala de un árbol, son solo dos : Que se vaya secando y muera..o bien el primario nacimiento de brotes que llevarán al renacimiento y regeneración del mismo. Si fruto de nuestro trabajo el árbol muere , esto nos deja un sentimiento de derrota y fracaso y de falta de sentido, si por el contrario el resultado es la brotación y renacimiento, esto es lo que nos da sentido a nuestro trabajo y nos llena de la más grande de las felicidades al vernos participes de tan bello resultado.

Cuando nuestros usuarios ingresan y entran a vivir con nosotros, entrar en otoño podados o diría talados de su anterior vida. Antes con sus costumbres , su horario , su entorno social, vivían arraigados en su vida presente, con sus manías y defectos. Ahora entran ..” casi obligados, o resignados, en ocasiones”….donde tendrán que aprender a brotar de nuevo o morir en ese último intento. Para una persona mayor brotar de nuevo implica un esfuerzo enorme y necesitará de apoyos, ayudas para lograr dar sentido a su vida en esta última etapa maravillosa que viviremos si o sí con ella, queramos o no. Morir en el intento será el efecto o la consecuencia del fracaso en este esfuerzo y llevará a encontrar y vivir en el vacío existencial , el vacío en sus vidas..la muerte en vida….los sepultados en el día a día, fácilmente reconocibles. Cuando visito una residencia y veo en ella muertos de sentido, apáticos, malhumorados….con la única esperanza de que llegue cuanto antes el fin sin sufrimiento a esa situación , siempre me pregunto si hemos hecho todo lo posible para que esto no sea así. Las Residencias que logran dar un ambiente donde crecer en sentido de vida, son en cambio Residencias de Esperanza y se reconocen enseguida desde cualquier visita rutinaria externa.

Solo espero y deseo con todas mis fuerzas que en esta última lucha por brotar o morir en el intento, nuestros residentes no se encuentren solos, que tengan todo nuestro apoyo y caminemos junto a ellos en esta etapa y que ellos sepan con certeza que estamos a su lado incondicionalmente. ..

” el amor constituye la única manera de entender a otro ser humano en lo más profundo de su personalidad “……Victor Frankl.