Diez tendencias en el diseño de residencias de mayores

Hace poco he estado leyendo un interesante artículo publicado en la web BDCNetwork en el que un arquitecto que lleva treinta años trabajando en el diseño de residencias geriátricas y otro tipo de viviendas para personas mayores, reflexiona sobre lo que para él son las diez tendencias que están influyendo la construcción de este tipo de establecimientos en los Estados Unidos en la actualidad.

Se trata de una reflexión personal y que difícilmente puede ser trasladada a realidades como la Española o la Latinoamericana. No obstante me he permitido interpretar el artículo para acercarlo a quienes creo leen este blog.

No he hecho una traducción sino que me he centrado más en aspectos que he considerado más interesantes. Para quiénes estén más interesados en el tema, recomiendo entrar en la página donde aparece el original y en la que se pueden ver algunas fotografías que ilustran las tendencias.

Espero que os parezca interesante.

Diez tendencias en el diseño de residencias geriátricas en Estados Unidos

El crecimiento constante del número de jubilados y el tsunami que se nos avecina cuando la generación del “baby boom” alcance los setenta años está haciendo que en muchos países occidentales florezca un sector de “opciones residenciales para personas mayores” que presenta un amplio abanico de opciones que dependen de la autonomía o dependencia de la persona y, sobre todo, de su capacidad económica.  En Estados Unidos, donde los babyboomers están alcanzando ya la edad de jubilación ese sector presenta una gran creatividad.

Los modelos existentes hasta ahora se están poniendo en cuestión y, partiendo de la “investigación del diseño ambiental” se está planeando una amplia gama de nuevas opciones que pretenden adaptarse a la hora de plantear el diseño de residencias geriátricas a lo que piensan y prefieren las personas que acabarán viviendo en ellas.

En la web bdcnetwork.com han recopilado las 10 tendencias que consideran dominantes en este sector en los Estados Unidos para el diseño de viviendas pensadas en personas de alto nivel adquisitivo. Resulta curioso que algunas de las tendencias sean claramente contradictorias, cosa que demuestra que el sector geroasistencial en Estados Unidos también vive un momento de evolución y cambio.

Veamos si alguna de las mismas podrían ser trasladadas a nuestra realidad cercana.

1. Optimización de la privacidad y la dignidad del residente
2. Creación de entornos hogareños
3. La introducción de conceptos tomados del sector hotelero
4. Ampliando la elección individual
5. El uso de la tecnología para mejorar la calidad de vida.
6. Llenado en el continuo asistencial
7. Integración de las comunidades de jubilados
8. El resurgimiento de las residencies en el centro de las ciudades
9. Buscando entornos más sostenibles
10. Aprovechando la globalización

1. Optimización de la privacidad y la dignidad del residente

Las residencias geriátricas, en sus diferentes formatos, suponen en Estados Unidos la opción más numerosa entre los servicios residenciales para personas mayores y la que se enfrenta a cambios más profundos.

En todo Estados Unidos hay casi dos millones de camas instaladas en residencias geriátricas con diferente nivel de atención: centros de enfermería especializada, centros de atención a largo plazo, y hogares de ancianos, que se han ido construyendo durante los últimos decenios siguiendo el concepto que han impuesto las normativas de los diferentes Estados. Según ese concepto, una residencia es una especie de hospital de baja tecnología.

La habitación típica es doble, con una cortina entre las camas y un cuarto de baño (wc y lavamanos pero no ducha). El artículo de Bdcnetwork llama la atención sobre el hecho de que las normativas sobre residencias geriátricas suelen establecer, en lo que se refiere a dormitorios, medidas que son parecidas a las que se requieren en una celda de una prisión de alta seguridad.

La ducha se lleva cabo en muchas residencias en duchas geriátricas comunitarias. Algo que, si bien puede resultar beneficioso desde un punto de vista organizativo, no es visto de forma positiva por parte de las personas que ahora ingresan en residencias geriátricas americanas. La tendencia lleva al diseño de residencias geriátricas diferentes.

Las entidades gestoras, tanto las que tienen ánimo de lucro como las que no, llevan un tiempo construyendo residencias de mayores con habitaciones individuales que cuentan con servicio higiénico completo.  La existencia de “baños fuera de las habitaciones” se reserva en las nuevas residencias para zonas tipo spa, piscina o hidromasaje, allá donde se instalan.

Así las cosas en Estados Unidos se construyen hoy en día, muy pocas residencias geriátricas en las que haya habitaciones “semi-privadas” (o sea dobles) siendo las entidades sin ánimo de lucro las que han liderado esa tendencia. En algunos casos se han planteado diseños de residencias verdaderamente espartanos en los que se renuncia a algunas comodidades pero, de ninguna forma a la reintroducción de habitaciones compartidas.

Por supuesto esta tendencia encarece la atención. No obstante, en el artículo se defiende que tanto las entidades benéficas como las mercantiles ven que los nuevos residentes no quieren ni oír hablar de compartir habitación.

Respecto a las residencias privadas, muchas de las nuevas apuntan hacia residentes con un alto poder adquisitivo para quienes la habitación individual es la única opción

El artículo pone el ejemplo de una residencia geriátrica en New Rochelle, Nueva York, que han diseñado para una organización no lucrativa, con muy poco dinero, en la que la privacidad de los residentes ha sido una de las prioridades máximas.

2. Creación de entornos hogareños

Una tendencia relacionada con la anterior lleva a la construcción de residencias geriátricas más pequeñas con entornos hogareños. El movimiento Green House, que comenzó hace unos años en Tupelo, Misisipí, es el que ha difundido de forma más amplia este tipo de entornos.

Esta «pequeña casa» gira en torno al concepto de que las personas mayores no quieren estar en una institución; sino algo más parecido con lo que ellos entienden como un “hogar”.

En este tipo de residencia de tercera edad, los cuidados especializados que reciben los mayores se prestan en unas instalaciones que son esencialmente grandes casas de 8-10 dormitorios con una o varias salas de estar y comedores, atendidos por cuidadores de 24 horas.

Como la necesidad de aplicar economías de escala lleva a que las residencias tengan un determinado tamaño para poder contar con todo el personal y servicios a un precio que los clientes puedan pagar (el artículo habla de residencias en Estados Unidos con 400 ó 600 camas), la tendencia a crear entornos hogareños ha llevado a que algunos grandes complejos residenciales para ancianos se hayan “fracturado” convirtiéndose en una serie de unidades más pequeñas.

En España esta tendencia está llegando con la extensión de conceptos como “Atención Centrada en la Persona” o el “Housing”.

3. La introducción de conceptos tomados del sector hotelero (Hospitality Design)

Influidos por razones de aceptación en el mercado y de viabilidad operativa, algunos operadores y sus equipos de diseño están incorporando el Hospitality Desing (que podría traducirse como diseño hotelero) no sólo en el diseño de interiores, sino también en la planificación y programación de la vida en el centro.

La clave es huir de la visión de las residencias geriátricas como instituciones, aunque sabiendo que resulta imposible hacerlo del todo cuando una residencia atiende a varios centenares de personas mayores si la mayor parte sufre demencia o requiere de atención especializada constante.

Algunas comunidades de jubilados (complejos residenciales con apartamentos, bungalows y hasta barrios enteros dirigidos a personas mayores) y residencias están inspirándose en el tipo de diseño que utilizan las cadenas hoteleras y aplicando sus conceptos a sus propios centros.

Algunas de estas innovaciones son bastante simples de implementar y se basan en el uso de materiales de construcción comúnmente utilizados en hoteles americanos pero no en residencias. El artículo menciona el cambio de suelos de linóleo por moquetas o el revestimiento de paredes; el uso de mobiliario diseñado específicamente para su uso por parte de personas mayores pero que no tiene aspecto “institucional”, la ampliación de opciones de comida con comedores diferenciados o servicios de conserjería como los que se encuentran en un hotel.

Tanto en Estados Unidos como en Japón varios promotores han optado por seguir esta tendencia construyendo residencias que podrían confundirse perfectamente con un hotel de cuatro o cinco estrellas.

4. Ampliación de la elección individual

Las tres tendencias descritas hasta ahora han surgido y evolucionado debido a que los deseos de las personas mayores no siempre coinciden. Hay personas que querrán vivir siempre en un ambiente muy “hogareño” y otras que preferirán hacerlo en algo parecido a un hotel. Por eso es lógico que surjan en el mercado diferentes opciones para satisfacer diferentes deseos y expectativas.

Una sala de arte y artesanía en una residencia

Sala de arte en Fairhaven Continuing Care Retirement Community

El cambio que se ha producido en los Estados Unidos en los últimos años lleva a que cada vez más son las propias personas mayores las que están decidiendo como quieren que sea “su vida” y no otros miembros de la familia.

Habiendo tantos deseos y opciones de vida diferentes, es lógico que se amplíen las posibilidades y las ofertas diferenciadas, con un diseño de residencias geriátricas de tipos totalmente diferentes.

Esa ampliación de posibilidades está afectando no sólo al diseño sino a la forma contractual de acceder a los servicios: pago de cuotas mensuales, alquiler, pago pago por una “cuota de tiempo” y nuevos modelos que siguen surgiendo cada día.

5. El uso de la tecnología para mejorar la calidad de vida

La tecnología está finalmente empezando a tener un impacto significativo en las decisiones de la tercera edad.

Eso quiere decir que avances tecnológicos que existían y se utilizaban en otros ámbitos se incorporan al diseño y funcionamiento de las residencias.

Esta tecnología está afectando las comunicaciones internas de la residencia y permitiendo que las personas tengan una vida con una atención menos restrictiva.

Hay colgantes inalámbricos que activan un teléfono en caso de que un cliente sufra una caída sin que él tenga que hacer nada; dispositivos de monitoreo del estado de salud del residente, detectores de movimiento, aparatos relacionados con la administración correcta de medicamentos y muchos más.

6. Llenando el “continuo asistencial”

Esta tendencia se refiere específicamente a los Estados Unidos donde existen diferentes tipos de residencias para mayores que atienden a personas con diferente necesidad de atención. Así, alguien puede ir a vivir a una comunidad de jubilados donde sólo podrá permanecer mientras sea totalmente válido; puede ir a una residencia de “assisted living” donde recibirá una serie de cuidados o a una “nursing home” que sería un centro mucho más asistido.

La tendencia a que se refiere el artículo es una que lleva a algunos operadores a crear complejos que garantizan un “continuo asistencial”. La idea es dar respuesta a esa parte del mercado que quiere elegir una opción que les dé seguridad para el resto de sus vidas sin tener que preocuparse por tener que ir buscando diferentes tipos de atención en diferentes momentos.

No se trata de volver a una “gran institución” sino de facilitar ese “continuo” aunque sea en diferentes instituciones pero existiendo la seguridad de que el operador de encargará.  Esto hace que algunos operadores tradicionales de un tipo de servicio estén expandiendo su campo de actuación a otros.

7. Integración de las comunidades de jubilados

Las comunidades de jubilados, («CCRC» en sus siglas en inglés) son un fenómeno típicamente americano. Esos “barrios” o “pueblos” de personas mayores en los que se vive en una comunidad casi cerrada en la que sólo residen mayores en viviendas adaptadas, con unas actividades sociales a su disposición y la prestación de servicios domésticos y algunos asistenciales ofrecidos por la comunidad.

Estas comunidades existen desde los años cincuenta y se extendieron mucho a partir de los setenta, sobre todo en estados cálidos a los que acudían jubilados del norte, aunque después también lo hicieron por toda la geografía norteamericana.

La tendencia de la que habla el artículo es la que lleva a algunas de las nuevas comunidades a integrarse más de forma que quienes viven en ella tengan más opciones entre las que elegir. Así se mencionan varios ejemplos en los que se están construyendo comunidades de jubilados pegadas a campus universitarios de forma que los mayores pueden beneficiarse de la amplia oferta cultural y de actividades que suele existir en entornos de ese tipo.

8. El resurgimiento de las residencia en el centro de las ciudades

En Estados Unidos (quitando dos o tres grandes ciudades que suponen verdaderas excepciones) la mayor parte de las personas viven alejadas de los centros urbanos en los alrededores de ciudades o en poblaciones pequeñas.

Esta realidad ha hecho que existan pocas residencias y viviendas para mayores en los centros de ciudades.

Parece que esta situación empieza a revertirse en algunas de esas ciudades que ven como algunas familias vuelven a poblar los centros atraídos por ventajas que ofrecen las transformaciones que éstos están viviendo.

La consecuencia es que hay personas mayores que quieren mudarse de nuevo al centro de la ciudad para disfrutar de la riqueza de un estilo de vida urbana y las comodidades tales como tener un portero así como los servicios y productos que se pueden recibir en el domicilio.

Los operadores de viviendas para mayores han entendido esa demanda y empiezan a surgir apartamentos asistidos y viviendas en zonas urbanas en los que antes no existían.

9. Buscando entornos más sostenibles  

Para muchas personas de todas las edades, el hecho de que su estilo de vida sea sostenible para el medio ambiente representa un factor a la hora de tomar decisiones de gasto. Esto incluye a algunas personas mayores que valoran que el lugar donde van a residir sea respetuoso con el medio ambiente.

Esta realidad, junto con el ahorro a largo plazo que supone el diseño sostenible, ha hecho que los proveedores de servicios estén apostando por “opciones verdes” tanto en el diseño de nuevas instalaciones como en los aspectos operativos de las mismas.

Esta tendencia lleva a un mayor aprovechamiento de la luz natural combinado con la utilización de tecnología de iluminación artificial de bajo consumo, la mejora de la calidad del aire interior, la conservación de energía y agua, creación de “ambientes naturales” y un papel más significativo del jardín en la vida de los centros.

Otro concepto de sostenibilidad que se está observando en Estados Unidos es la reutilización adaptativa de los edificios existentes. Ejemplos interesantes han sido la conversión de los monasterios y conventos en viviendas para mayores o residencias geriátricas.  La disminución de vocaciones religiosas han hecho que algunos conventos hayan sido primero residencias “para monjas mayores” y, cuando éstas han fallecido, han pasado a ser residencias de tercera edad abiertas al público. Un ejemplo lo constituye la nueva instalación de Hermanas Dominicas en Grand Rapids, Michigan que pasó de ser ir a las hermanas mayores para, más tarde pasar a acoger a mayores de la comunidad circundante .

10. Aprovechando la globalización

Estas tendencias no se limitan a los Estados Unidos. Muchos otros países, especialmente en Asia, han visto cómo aumenta su población mayor y buscan nuevas opciones para crear servicios residenciales viéndose muy influenciados por los modelos estadounidenses.

En muchos países asiáticos, la tradición milenaria lleva que los ancianos sean cuidados en un entorno familiar por parte de sus hijas y familiares cercanos. No obstante el rapidísimo cambio económico y social ha llevado por un lado al aumento de la expectativa de vida, a la incorporación masiva de hombres y mujeres al mercado de trabajo, a la migración masiva desde entornos rurales a urbanos y a la consiguiente disminución de la familia extensa.

Como consecuencia estas sociedades ven que tienen muchos más ancianos que antes, en muchos casos con sus “cuidadores tradicionales” viviendo lejos y con la expectativa de vivir más años, en muchos casos, con dependencia.

En sociedades como Corea y Japón, donde el fenómeno empezó a producirse hace más de cuarenta años, hay una mayor voluntad por parte de los padres ancianos de no vivir necesariamente con sus hijos adultos. Hay, pues, un gran mercado potencial para el crecimiento de un sector residencial geriátrico.

El artículo considera que Europa se ocupó de la cuestión de envejecimiento de la población hace tiempo pero sus modelos no son fácilmente transferibles. En cambio, el modelo de Estados Unidos, está siendo copiado por otros países, particularmente en Asia.

Finaliza el texto con una interesante reflexión:

No hay ningún tipo de edificio, donde se puede ver una más correlación directa entre el buen o el mal diseño y su impacto en la vida de las personas que en una residencia de tercera edad.

El mal diseño da como resultado entornos confusos, opresivos y deprimentes. El bueno libera, anima, y mejora la calidad de vida de quiénes los habitan.  Y no hace falta fijarse mucho para diferenciar uno del otro.

5 respuestas hasta ahora

  1. muy acertada esta reflexión que podría trasladarse a los centros de nuestro país con pequeñas actuaciones en los edificios existentes se consigue un gran impacto en la calidad de vida de residentes, familias y trabajadores.
    El factor diferencial de nuestros centros es la realidad intergeneracional como valor de nuestra sociedad a preservar y desarrollar. Por lo que completaría esta lista con el punto 11 «Espacios intergenearcionales» donde interactúen personas de todas las edades.
    ¡¡enhorabuena por el boletín¡¡ reflexiones para empezar la semana

  2. Vicky Pérez portabell dice:

    Muy interesante .. Gracias x la realidad y nuevas tendencia kas en Usa.

  3. YANETH SARMIENTO NOGUERA dice:

    Excelente, de gran ayuda a mi trabajo de tesis

  4. Teresa jimenez dice:

    Me gustaria saber si hay algo en España con estas caracteristicas