Proyecto Branyas: importante estudio sobre la Covid19 y la geriatría

La pandemia de covid-19 está siendo especialmente dura para las personas mayores. La mortalidad elevada se une a las secuelas físicas y psicológicas que deja la enfermedad en quienes la superan, por eso es importante que la sociedad se prepare ante la eventualidad de nuevos brotes.

Sin embargo, es preciso dejar claro que coronavirus y tercera edad no tienen que ir siempre unidos a mortalidad. Muchas personas mayores han superado con éxito la enfermedad y una de ellas, Maria Branyas, de 113 años y usuaria desde hace 20 años de una residencia en Olot (Gerona), da nombre a un importante estudio que se empieza a desarrollar y que une coronavirus y geriatría.

El Proyecto de Investigación Branyas surge como resultado de la unión entre la farmacia comunitaria de Vilassar de Dalt, en Barcelona, la mayor de su tipo en España en gestión farmacológica para residencias  geriátricas y el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Agencia Estatal para la investigación científica y el desarrollo tecnológico adscrita al Ministerio de Ciencia e Innovación. Los Institutos del CSIC que participarán en este proyecto son el Centro de Biología Molecular Severo Ochoa, (CBMSO), el Instituto de Economía, Geografía y Demografía y el Instituto de Investigación en Ciencias de la Alimentación, (CIAL).

Por su parte, la Farmacia de Dalt es una farmacia comunitaria dedicada desde hace más de quince años a la gestión integral farmacológica. Se trata de la mayor farmacia de España en este trabajo, gracias su Sistema Integral de Gestión Farmacológica 5Cs FARMA, que une un sistema informático de control, la preparación dosificada de la medicación mediante robots (SPDA)  y un protocolo de gestión para garantizar que las personas tengan un acceso inmediato a los tratamientos farmacológicos prescritos, garantizando la mayor tasa de adherencia y cuidado farmacológico posible. Sirve a numerosas residencias y centros de asistencia social y de trastornos de conducta de toda Cataluña. Esto hace que disponga de una importante base de datos referentes a la salud y datos sociodemográficos de las personas que viven a centros geriátricos.

El objetivo es descubrir por qué el virus ha tenido mayor incidencia en los entornos de residencias geriátricas, para poder combatirlo. Se trata de una investigación integral del efecto de la covid-19, desde el punto de vista clínico y farmacológico.

Es estudio se realiza mediante una visión multidisciplinar que integra estudios socio-demográficos, biológicos, inmunológicos y de la microbiota intestinal de personas ya infectadas y de no expuestas del mismo colectivo.

Los aspectos concretos que se estudiarán son: patologías previas y covid-19, carga viral en residencias, patrón de evolución del virus, afectación o eficacia de la medicación que se tomaba antes y durante la pandemia, inmunidad individual y de grupo, duración y fortaleza de la inmunidad, secuelas post-covid, relación entre genética y covid-19, relación entre microbiota intestinal y covid-19 y factores sociodemográficos y conductuales. Con los datos que se recopilen se pretende establecer correlaciones que indiquen especial riesgo ante una futura infección de las personas no expuestas, crear unos patrones que determinen cómo ha afectado el virus a los residentes de centros geriátricos, el perfil de las personas con mayor afectación, el de las personas fallecidas, etc., estableciendo un mapa general de las personas de edad avanzada como grupo de riesgo, que ayude a protegerlas más ante eventuales brotes de coronavirus al poder establecer medidas preventivas.

Este trabajo, que durará dos años y será el mayor proyecto de investigación integral de la covid-19 en población geriátrica, cuenta con un presupuesto de 120 000 euros. En él participan 92 profesionales, entre los que se encuentran investigadores, médicos, farmacéuticos y enfermeras, que valorarán el impacto del virus en más de 3000 personas mayores.

La primera fase del proyecto, que ya está en marcha, consiste en un estudio de seroprevalencia, que estará respaldado por el Centro de Biología Molecular Severo Ochoa. Este trabajo determinará el grado de inmunidad de grupo alcanzado en las residencias geriátricas afectadas por el coronavirus. Los análisis servirán también para determinar cómo se desarrolla la inmunidad en las personas afectadas.

Más adelante, el estudio abarcará otros aspectos, como la relación entre microbiota e inmunidad, con el Instituto de Investigación en Ciencias de la Alimentación (CIAL).

Se elaborarán informes y entregables en los plazos que determina el Plan de Trabajo, que incluirán un amplio estudio de carácter sociológico y psicológico, que valorará cómo ha afectado a la calidad de vida el impacto del virus, especialmente en lo relacionado con comportamientos individuales.

Durante el tiempo que dure el proyecto, el CSIC y la Farmacia de Dalt colaborarán con medios e infraestructuras que incluirán las bases de datos y muestras biológicas recogidas. También se facilitarán y las entrevistas a los residentes.

Este tipo de estudios proporcionan las bases de datos para poder establecer los recursos y programar las actuaciones necesarias para estar preparados ante una nueva oleada de coronavirus. También proporcionan interesantes datos de salud de la población que vive en residencias para mayores, necesarios para mejorar de manera efectiva la atención que reciben en todo momento, no solo cuando surge la enfermedad.

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