El envejecimiento activo como concepto de calidad de vida
- Publicado por Josep de Mart铆
- Posted on octubre 22, 2020
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Se observa de unos ya unos a帽os que el concepto 芦envejecimiento activo禄 es una de los m谩s repetidos por parte de administraciones, instancias sanitarias, servicios sociales o entidades y empresas que se dedican a prestar servicios para la tercera edad como residencias geri谩tricas, centros de d铆a, centros de rehabilitaci贸n, etc. Incluso es clave cuando se ofrecen cursos para universidad de mayores o excursiones del IMSERSO. Es un reclamo publicitario, y en este caso no es enga帽oso, sino todo lo contrario, que une bienestar y mantenimiento de la actividad y de un estado f铆sico y mental saludable.
Ahora bien, 驴qu茅 es exactamente el envejecimiento activo y en qu茅 afecta de manera real a la vida de las personas? En muchas ocasiones, da la impresi贸n que desde las administraciones, sobre todo, se trata de publicitar acciones dirigidas a un segmento cada vez mayor de votantes y no de una estrategia real, planificada, sostenida en el tiempo y con objetivos cuantificables que permita un aumento de la calidad de vida de las personas mayores.
Una reflexi贸n que ser铆a fundamental plantearse es que programar acciones m谩s o menos l煤dicas que ofrecen ocupar el tiempo es en s铆 mismo ya un beneficio, pues todo lo que proporciona satisfacci贸n personal contribuye al bienestar de la persona. Sin embargo, eso no es suficiente, o no deber铆a ser considerado suficiente, adem谩s de eso, del bienestar que proporciona el ocio, debe haber en las actividades que se plantean un objetivo final de lograr en funci贸n de sus gustos, el tiempo del que dispongan o de su capacidad econ贸mica, una verdadera voluntad de cambio de mentalidad de c贸mo se afronta la vejez desde y de la forma de vivirla, que ser谩 lo que haga que la persona que disfruta de una charla sobre un libro quiera tambi茅n formar parte de un club de lectura o que quien se apunta a una visita guiada luego se anime a ser gu铆a para otros.
Es decir, las pol铆ticas de envejecimiento activo no deben limitarse a un programa de acciones, deben tener como base una apuesta clara, sostenida por profesionales como psic贸logos, terapeutas ocupacionales y trabajadores sociales que trabajen por un cambio de mentalidad en las personas mayores para que pasen de ser receptoras de servicios, que pueden aceptar o no, a ser verdaderos agentes activos en la organizaci贸n y realizaci贸n de actividades que les impliquen y que sean ellos los garantes de aquellas acciones que les permiten vivir una tercera edad plena, no solo con su participaci贸n, sino con la proyecci贸n que esta pueda tener en la sociedad y la importancia que se le d茅 que debe ir m谩s all谩 de un reconocimiento institucional en un acto anual, un premio o en una cena de la tercera edad.
No se trata de no hacer este tipo de actos de homenajes a los mayores, se trata de, adem谩s de eso, plantear pol铆ticas reales, efectivas, cuantificables y con presupuesto que superen estos actos simb贸licos, que aunque sean tambi茅n necesarios, no dejan de ser meros actos reivindicativos o l煤dicos con cierta repercusi贸n social, pero poca en la realidad fuera de las manidas declaraciones institucionales de puesta en valor de la experiencia y el sacrificio de los mayores que se escuchan de manera reiterada, pero que no se traducen en programas y ayudas r谩pidas y eficaces que supongan una repercusi贸n cuantificable y directa en el bienestar y en el fomento de la actividad e influencia social efectiva de la tercera edad.
Es conveniente hacer un poco de historia para entender de manera amplia el concepto 芦envejecimiento activo禄. En los a帽os 90, la Organizaci贸n Mundial de la Salud (OMS) adopt贸 el t茅rmino envejecimiento activo, para sustituir envejecimiento saludable. El prop贸sito era resaltar que, adem谩s de la atenci贸n sanitaria, hay otra serie de factores sociales, econ贸micos y culturales que afectan de manera definitiva al proceso del envejecimiento de las personas y en consecuencia de las sociedades en su conjunto.
El modelo de salud para las personas mayores, seg煤n la OMS, debe garantizar la consecuci贸n, mantenimiento y disfrute cuatro exigencias: autonom铆a, independencia, calidad de vida y esperanza de vida sana. Estas exigencias suponen la superaci贸n del concepto tradicional de que la salud es solo la ausencia de enfermedad, supone una visi贸n integral de la persona en la que su bienestar desborda ese l铆mite y abarca su situaci贸n social tanto a nivel afectivo, econ贸mico como agente participativo, autonom铆a en sus decisiones y bienestar psicol贸gico. Envejecer conlleva adem谩s unos retos de futuro como son las residencias del ma帽ana
En este sentido, se帽ala que el establecimiento de programas para las personas mayores basados en este modelo debe perseguir un fin l煤dico, de entretenimiento, que sea una diversi贸n, una ocupaci贸n del tiempo de ocio, pero enmarcado dentro de unos objetivos definidos estrechamente relacionados con el propio ejercicio f铆sico y con la planificaci贸n y cuantificaci贸n de la carga: duraci贸n, intensidad y regularidad suficiente para sacar el m谩ximo provecho y conseguir beneficios para la calidad de vida de la persona a nivel fisiol贸gico y social.
Se trata, en definitiva, que los programas de envejecimiento activo que se propician desde las distintas administraciones, entidades o empresas de servicios sociosanitarios den un paso m谩s. Se hacen muchas cosas, en su inmensa mayor铆a, adem谩s, son muy bien acogidas y tienen gran 茅xito entre las personas a las que van dirigidas. Por eso se hace en este punto necesario plantear dan un paso m谩s en el que el envejecimiento activo no sea una parte de un programa o de una iniciativa social, sino un eje de actuaci贸n sistematizado que forme parte de los planes de acci贸n y que cale como un servicio m谩s a la ciudadan铆a, a la que se deber谩 de dar herramientas y concienciar de que una buena calidad de vida en la vejez es en muchas ocasiones el resultado las propias acciones, no solo cuando se llega a la jubilaci贸n, sino antes.
Una buena vejez, rica en experiencias es resultado de, adem谩s de un razonable estado de salud que, por desgracia no siempre es posible, de una actitud ante la vida y de las oportunidades que la sociedad, de manera organizada y asequible para todos ofrece.
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