Elegir la mejor residencia de la tercera edad. Diez consideraciones

Lo cierto es que elegir una residencia de tercera edad para un ser querido es una decisión difícil que puede ser muy emotiva. En Inforesidencias.com somos conscientes de ello, porque hablamos día a día con personas que necesitan encontrar una residencia para su familia, lo que les hace sentirse desbordados por las escasas ya veces muy malas opciones que existen hoy en día en el mercado español.

Uno de los aspectos más importantes a la hora de elegir una residencia ideal es el grado de salud, y el nivel de dependencia en el que se encuentra la persona mayor para quien se busca residencia. Cuando un mayor presenta un problema de salud específico, es importante evaluar aquellas opciones que se adapten a las necesidades adicionales que requiere el usuario.

Actualmente existen residencias especializadas en personas con demencia, alzheimer, parkinson o convalecientes de un ictus. No todas las residencias son iguales ni ofrecen los mismos servicios por lo que la necesidad de la persona mayor debe ser determinada en detalle para encontrar la residencia que se ajuste mejor.

  1. EL PRECIO. FUNDAMENTAL, AUNQUE CON MATICES

El precio de una residencia de mayores varía en función de diferentes factores, entre ellos la ubicación, los servicios que ofrece y sus actividades. También hay que saber que existen servicios incluídos en el precio y otros que se consideran adicionales y se pagan a parte. Si el residente necesita cuidados específicos (por sufrir demencia, alzheimer, ictus, parkinson u otras enfermedades) hay que saber de antemano si éstos estarán incluidos en el precio. Por eso es importante evaluar las necesidades del futuro residente, de acuerdo con su alcance económico.

  1. LOS RÁNKINGS DE RESIDENCIAS

Lo primero que podemos considerar es algún ránking que esté establecido por alguien de confianza. En Inforesidencias.com funciona el indicador de transparencia que determina qué residencias de 3ª edad comparten más datos de una forma transparente y comparable. Ese puede ser un primer elemento de comparación.

Todas las residencias de personas mayores de España tienen que estar autorizadas por parte de la Comunidad Autónoma lo que supone también que lo hayan sido por parte del Ayuntamiento del municipio donde se encuentran. Estos organismos garantizan que las residencias brinden a las personas que en ellas viven una atención segura, eficiente, y de calidad.

Cada Comunidad Autónoma tiene su normativa diferente por lo que no es lo mismo buscar una residencia en Asturias que en Andalucía.

  1. UBICACIÓN DE LA RESIDENCIA DE MAYORES

Escoger una residencia de tercera edad en puede convertirse en algo muy complicado. Partiendo de la base de dónde vivía la persona mayor antes del ingreso, podemos estar buscando en el mismo municipio o en alguno cercano.

Por un lado, si suponemos que buscas cuidados para un familiar a quien, es viable que desees una residencia de tercera edad lo más cerca posible de donde tú vives para poder visitarla asiduamente.

Si el ser querido vive en una comunidad diferente siempre surge la duda de si es mejor que se mude a donde vive quien está buscando para poder facilitar las visitas o, sin embargo debería quedarse donde está a pesar de que sea más difícil ir a vere, pero en cambio permanezca en su entorno.

Sea como sea, piensa en cómo te desplazarás para conocer la residencia de mayores y para las futuras visitas si se llega a producir el ingreso. Si no conduces, valora los medios de transporte público que haya a tu disposición.

Esto puede significar que la residencia de tercera edad más cercana no en todos los casos es la más favorable, por lo cual quizás debas agrandar algo más su abanico de opciones.

  1. LEE LAS CRÍTICAS Y OPINIONES DE LAS RESIDENCIAS QUE PUEDAS CONSIDERAR

Habitamos un mundo en el que las críticas negativas están por todas partes. Por eso, si queremos obtener opiniones que puedan interesarnos sobre residencias geriátricas deberíamos acudir a lugares en los que opinen quienes de verdad conozcan la residencia. Uno de esos lugares es el portal Inforesidencias.

llevar un check list con dudas también es muy bueno

Las reseñas en internet son estupendas, por eso, siempre es conveniente, no sólo fiarse de ellas sino también poder escribirlas para compartir la experiencia con otras personas. Antes de existir sistemas de reseñas on-line sólo cabía fiarse de lo que nos dijese un amigo o amigo de amigo. Hoy todo se ha expandido y podemos ampliar mucho.

  1. CONTACTAR CON RESIDENCIAS PRE-SELECCIONADAS

Cuando hayas encontrado en internet dos o tres residencias que puedan interesarte a priori. Lo mejor es que te pongas en contacto con ellas analizando cada detalle del proceso. Tan importante es saber cómo te responden al teléfono como cuánto tardan en ofrecerte una visita o qué información te piden.

Considera si son flexibles en el horario de posible visita y quién te dicen que te atenderá durante la misma. Según las necesidades de tu ser querido quizás quieras hablar con personal sanitario (médico o enfermera) o de otro tipo

  1. EQUIPO PROFESIONAL. EL PERSONAL DE LA RESIDENCIA

El personal de que dispone una residencia es un elemento clave. Son ellos y ellas quienes van a estar ocupándose por día en cada actividad y rutina del residente.

Por eso resulta de tanta importancia antes de elegir la mejor residencia de la tercera edad conocer de primera mano quién forma parte del grupo profesional que se ocupa del cuidado, nutrición, seguridad y atención de los residentes durante las 24 horas. O sea, tanto quién como cuántos.

Además de una formación específica estos trabajadores ya sean doctores, enfermeros, auxiliares, limpiadores, cocineros… tienen que ser personas con unas habilidades y competencias adecuadas, que conozcan su trabajo perfectamente y que a la vez tengan pasión por el mismo fomentando la buena praxis. Desde el punto de vista de la personalidad, es conveniente que tengan una personalidad tranquila, que sean pacientes, agradables y alegres.

Cada residencia de ancianos tiene un equipo de profesionales diferentes, por eso hay que preguntar y comparar detalladamente.

  1. TIPO DE HABITACIÓN. DORMITORIO INDIVIDUAL O DOBLE

En las residencia de tercera edad, la mayor parte de dormitorios están equipados para atender a personas que viven con dependencia. Las habitaciones pueden ser individuales o dobles y todas tienen camas que pueden adaptarse a las diferentes necesidades de los residentes. Las normativas exigen que dispongan de calefacción y (en algunas comunidades autónomas) aire acondicionado; un armario y espacio de almacenaje, mesilla de noche. Lo normal en las residencias construidas durante los últimos años es que tengan dotación propia de baño (wáter, lavabo y ducha), aun así, todavía existen algunas más antiguas en las que los cuartos de baño son compartidos por más de un dormitorio. Algunas residencias dotan los dormitorios de toma de oxígeno y vacío. Hay que valorar si es una necesidad que tenemos.

  1. EL DÍA A DÍA DE LA RESIDENCIA

Otras características que deberías tener en cuenta es que los familiares se aseguren que en el centro residencial geriátrico disponga de un programa de actividades que sean variados y adaptados a las necesidades y preferencias de las personas mayores, incluyendo actividades lúdicas y estimulación cognitiva. Cuando una persona vive en una residencia geriátrica hay que intentar que no se sienta sola, que no se aburra y que se sienta útil. Para ello es bueno que existan actividades significativas que la persona se sienta cómoda haciendo.

Las menores residencias fomentan actividades y ocupaciones que hacen que la persona siga en contacto con su entorno anterior (familia y amigos) además de establecer nuevos lazos de relación e incluso amistades.

Algunas de las actividades que suelen ofrecer las residencias de tercera edad son la terapia ocupacional, fisioterapia, ejercicios físicos, talleres de memoria, paseos o salidas al exterior. Todo ello sin dejar de lado a los residentes que viven con deterioro cognitivo (demencia, alzheimer) para quienes es muy aconsejable llevar a cabo talleres terapéuticos como los de lectura y escritura, cálculo o revisión de noticias…

  1. VISITAS DE FAMIILARES Y AMIGOS: HORARIOS Y FLEXIBILIDAD

Como cada residencia es diferente, a la hora de elegir la Elegir la mejor residencia de la tercera edad para uno mismo, vale la pena valorar que en los centros residenciales no debería existir un régimen de visitas demasiado estricto ni limitativo.
Lo ideal sería que los residentes eligiesen a qué hora y cómo quieren recibir visitas. Esto incluye la posibilidad de recibirlas en el dormitorio, en las salas o incluso salir a pasear con la visita fuera de la residencia.

Hay que mirar el tablón de anuncios y el Reglamento Interior para ver cuáles son los horarios e incluso si las visitas podrían quedarse a comer en la residencia.

La única limitación al horario y forma de las visitas aceptable es el respeto a las preferencias de los demás residentes,

  1. EN RESUMEN

Hay tantas cosas que tener en cuenta a la hora de valorar una residencia que resulta muy difícil concretarlas en unas pocas para elegir la mejor residencia de la tercera edad.

Da valor a lo transparente que es la residencia en internet, compartiendo datos que normalmente se mantienen reservados (como las actas de inspección), lee críticas y comentarios de otras personas que han visitado y conocen la residencia. Una vez seleccionadas algunas residencias, llama y visítalas considerando siempre si lo que te dicen, muestran y hacen te genera confianza. El personal, el precio, las actividades del día a día y las instalaciones de la residencia pueden ser también factores importantes a tener en cuenta.

Como nadie está obligado a quedarse en una residencia en la que ingresó, si te has decidido por una y después no te gusta, no pasa nada, simplemente, cambia.

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