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Polimedicación en personas mayores
Una de las grandes preocupaciones del sistema sanitario es el consumo excesivo de medicamentos por un gran número de personas mayores. A veces son parte de un tratamiento médico y otras la persona mayor se automedica, y ese uno de los grandes retos de la geriatría y del sistema de salud. La polifarmacia o polimedicación se refiere a la ingesta de un gran número de medicamentos indicados o no por el médico a veces por un determinado tiempo y otras por tiempo indefinido, Para la OMS es “consumir más de tres medicamentos simultáneamente”. Para el Ministerio de Sanidad y Política Social lo define como “pacientes con enfermedades crónicas que están tomando más de 6 medicamentos de forma continuada, durante un periodo igual o superior a 6 meses”.
Aquí cabe preguntarnos ¿Porqué los ancianos tienden a consumir muchos medicamentos?. Una de las principales razones es que en ocasiones los mayores son más susceptibles de cursar con varias patologías a la vez, pero los médicos que prescriben el medicamento también influyen en la excesiva y errónea prescripción de medicamentos.
Factores que influyen en la medicación.
– La edad, a más edad más probabilidades de enfermedades y más medicamentos.
– Las enfermedades crónicas (diabetes, hipertensión, hipercolesterolemia, enfermedades cardiovasculares, fractura de cadera y problemas renales) todas estas enfermedades pueden estar presentes en una sola persona.
– Las personas que viven solas son más propensas a automedicarse.
– Personas con alguna demencia.
– Las personas mayores frágiles : Personas con pluripatologías, mayores de 70 años, sin soportes familiares o amistades, déficit sensorial y auditivo, problemas económicos, con problemas para realizar una o varias de las actividades básicas e instrumentales.
– Vivir en las zonas rurales donde no existen médicos o solo asisten una o dos verdes por semana.
– La dependencia de otra persona. Si existe una buena relación familiar la toma de medicamentos se hace de forma correcta y oportuna.
El abuso de medicamentos tiene graves consecuencias, existen más probabilidades de ingreso al hospital, más consecuencias de caídas y fracturas, malestar general, mareos, afectación de algunos órganos como es el caso del hígado y riñón, afectación del estado anímico, se deteriora la percepción de salud ya que a más medicamentos se relaciona con una mala salud. A corto o a largo plazo el consumo excesivo de medicamentos afecta a todo el organismo. Por ejemplo los medicamentos antiinflamatorios no esteroides, su uso prolongado puede llegar a causar insuficiencia renal con consecuencias más graves en la población anciana.
Para prevenir estás situaciones es fundamental la coordinación entre el médico, la enfermera el paciente y la familia, aunque en el caso de la familia cuando el adulto mayor vive solo o no tiene familiares que se hagan cargo es más complicada la supervisión. Sin embargo fomentar la coordinación entre el médico y los diferentes especialistas que abordan las enfermedades de un solo paciente, la enfermera, trabajo social y la familia es fundamental para un buen tratamiento farmacológico. La misma coordinación debe haber entre los profesionales de las residencias geriátricas y centros de día así como también entre la auxiliar de ayuda a domicilio, la revisión del número de medicamentos y fechas de caducidad en los centros geriátricos los hace la enfermera junto con el médico, en los hogares de la personas mayores sino cuenta con la familia y reciben el servicio de ayuda a domicilio, la auxiliar es quién debería revisar el número de medicamentos que se consumen y fechas de caducidad para avisar al médico de cabecera o a trabajo social. y así evitar el consumo excesivo de medicamentos o una intoxicación caducidad.
Más información en:
https://repositorio.unican.es/xmlui/…/Palacios%20Venero%2C%20Raquel.pdf y
www.redalyc.org/pdf/1804/180425791015.pdf